Por razones familiares conozco Aragón y Valencia. Y debo decir que desde hace años me sorprende cómo en muchos aspectos están superando económicamente a Cataluña.
Sólo un ejemplo. Ya hace tiempo que el Puerto de Valencia ha superado al de Barcelona en generación de tráfico de mercancías. Pero resulta que a ello puede añadirse este año una noticia que no hace mucho hubiera parecido inimaginable y es que el aeropuerto de Zaragoza va a superar también al de Barcelona en volumen de mercancías transportadas, al preferirlo cada vez más empresas internacionales como puerta de entrada a España, por delante del de Barcelona.
Creo que los políticos catalanes deberían reflexionar sobre el declive de la economía catalana. Hay regiones españolas que de forma discreta y sin creerse superiores a nadie, están demostrando un dinamismo económico envidiable mientras otros se dedican a generar permanentemente tensiones políticas, crear incertidumbres a inversores y empresas y perder sus energías en aventuras a ninguna parte.
María Raga