- El sumario de Aerolíneas Argentinas cobra así más importancia que el de la propia Marsans.
- Curiosamente, para la Fiscalía, los dueños de Marsans, así como su socio, Antonio Mata, cometieron un delito fiscal pero no delito de desvío de fondos públicos.
- Aparente contradicción que sólo se entiende por el deseo de dejar fuera a los directivos de SEPI.
La Fiscalía ha pedido 28 meses de cárcel para Gonzalo Pascual y Gerardo Díaz Ferrán (en la imagen), los antiguos propietarios del Grupo Marsans, hoy en proceso de liquidación. Pero no por el Sumario Marsans sino por la venta de Aerolíneas Argentinas, compañía que, en tiempos de Aznar, los 'hombres G' recibieron por un euro y encima les regalaron más de 758 millones de euros de dinero público español.
Curiosamente, sólo Hispanidad se ocupó de este asunto en la prensa española, contra el muro que colocaba tanto el Gobierno del PP como, más tarde, el gobierno socialista de Rodríguez Zapatero.
Tres eran los delitos de los que se acusaba a la pareja propietaria de Marsans: desvío de fondos públicos, estafa procesal y delito fiscal. Curiosamente, no parece posible el tercero sin los dos primeros pero, doctores tiene la fiscalía que lo sabrán responder, resulta que se les exonera del primero y del segundo y se les imputa por el tercero.
Aparente contradicción que sólo tiene una explicación, presunta explicación, naturalmente. Que se quiera dejar a un lado a los directivos de la SEPI en tiempos de Aznar. Uno de los imputados, Juan Gurbindo, pieza clave en la privatización de Aerolíneas, aún sigue en SEPI tras el Zapaterismo. Y es que la acusación particular que dirige el letrado Rafael Caro siempre he sospechado que el presunto desvío del dinero público español inicialmente destinado a sanear Aerolíneas Argentinas (ARSA) no se pudo desviar sin la connivencia de los ejecutivos de la empresa pública española.
En cualquier caso, Pascual y Díaz Ferrán pueden ser condenados antes por Aerolíneas que por la matriz Marsans.
Eulogio López
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