Película autobiográfica en la que su director y guionista, Mike Mills, recuerda a su padre que se declaró homosexual y dio un vuelco a su vida a los 75 años, tras morir su esposa con la que estuvo casado 45 años.

Poco después del fallecimiento de su padre, Oliver, un artista gráfico, conoce a Anna, una impredecible actriz francesa de la que se enamora. Mientras vive esta complicada historia de amor, Oliver recuerda los últimos años al lado de su padre, un hombre que "salió del armario" nada más fallecer su esposa y empezó de cero su existencia. Padre e hijo,  según justifica el título de la película, son principiantes (Beginners) tratándose de relaciones.  

Narrada en primera persona y con un montaje que va alternando secuencias de la relación del protagonista con su padre en paralelo con la que mantiene con su enamorada, Begginners, a pesar de que se publicita como una comedia dramática, es un gran drama porque describe un matrimonio fracasado debido a  la homosexualidad del esposo que nunca aportó lo que debía a ese compromiso. A más a más, ese matrimonio dejó un poso amargo y desconfiado en el hijo que se siente incapaz de mantener una relación amorosa estable con ninguna mujer. Todo ello desarrollado de forma lenta, en algunos momentos tediosa.

Resulta, además, paradójico, que aunque juega a mostrar la cara más amable del progenitor éste resulta antipático debido a su lado egoísta, hedonista (se declara no monógamo en su etapa gay) e, incluso, irreverente (cuando banaliza sobre la vida de Jesucristo cambiando su muerte)… A esto hay que unir que, para justificar los motivos que tuvo su padre para ocultar su condición sexual, Beginners incluye imágenes documentales de la lucha de los homosexuales en Estados Unidos por conseguir sus objetivos, con una intención claramente panfletaria.

Para: Los que quieran ver una película realizada a favor de la causa homosexual