Sr. Director:
Lo leo en la Prensa: En Estados Unidos, "un grupo de manifestantes negros marchó ante las oficinas de los partidos Demócrata y Republicano gritando "el aborto es linchamiento de úteros" ("womb-lynchings") y "genocidio negro" ("black genocide").

Los manifestantes también condenaron públicamente a Planned Parenthood -la organización pro-aborto más grande del país- que anunció en enero proveer con 10 millones de dólares a las campañas nacional y del Congreso".

Sí, el aborto es un negocio contra la mujer y contra el niño y nos lo quieren envuelto en papel de celofán como progreso. Progreso es ayudar a la madre embarazada que encuentra problemas, como pretende Red Madre y las asociaciones Pro-vida.

El asunto del aborto no es cuestión de derechas ni de izquierdas, sino de vida o muerte, en el que los comunistas rusos en el poder en 1920, fueran los pioneros.

Un partido decente defiende la vida de todos sin discriminar a nadie por su edad, salud o situación social. Dar el voto a quienes se proponen leyes lenitivas que provoquen abortos o infanticidios, es hacerse cómplices de la barbarie asesina (a cualquier edad del feto o nonato, la malicia del crimen es la misma) y acreedor de la justicia del Cielo. 

En España, se mata a niños que pueden vivir fuera del vientre materno con sólo una cesárea o provocando el parto a la madre; pero la erótica del crimen hace que algunos busquen eliminar al pequeño como el cazador a su pieza de cetrería.

Josefa Morales

josefamorales40@gmail.com