Sr. Director:
La inflación sube ya hasta el 4,3 por ciento, la más alta desde 1995. Por tanto, se suceden las malas noticias en nuestra economía y demuestran que estamos inmersos en una crisis importante, aunque lo quiera ocultar el ejecutivo socialista.
No cabe duda de que las pésimas cifras del desempleo del mes de enero han hecho mella en el Gobierno Zapatero. No es para menos porque son las peores de los últimos 25 años: 132.378 parados más en un solo mes.Pero el ministro de Trabajo, que no le apetece pasar otro mal trago, ya tiene la solución: no quiere que la realidad del mercado de trabajo en España vuelva a darle otro palo a sólo una semana de las elecciones (que es cuando el INEM hará público el balance de febrero). ¿Es conveniente para los intereses del gobierno ZP esta tensión? Parece que este tipo de "tensión" no.
Jesús Caldera ha puesto a su equipo a trabajar (una especie de "comando tipex") en una fórmula alternativa para contabilizar el número de parados. El truco consiste en crear dentro de la categoría "Demandantes de empleo no ocupados" una subcategoría. Ésta se llamaría "Demandantes de servicios previos al empleo". Incluiría a los parados que no pueden trabajar durante unos meses, ya sea por enfermedad, porque no tienen la formación suficiente o por otros motivos.
Y así, al pasar a engrosar esta subcategoría, ya no se les contaría como parados. Y... "alehop", se cargaría de un plumazo entre 50.000 y 100.000 personas de las listas de paro de enero. Algo que le vendría muy bien al Gobierno de Rodríguez Zapatero en vísperas de las elecciones y ocultaría la gravedad de nuestra situación económica.
Manuel Férriz Martínez
manoloferriz@hotmail.com