Es sabido que el intervencionismo del Gobierno socialista andaluz de Manuel Chaves en las seis cajas de ahorro en la región, no tiene parangón en ninguna otra comunidad española. Tras empantanar a las seis instituciones con sede en Andalucía con enfrentamientos interminables, y con el único objetivo de colocar amigos al frente (a veces, incluso expulsando del cargo a dirigentes socialistas), Chaves trata ahora de obligar a las seis cajas de ahorro a poner dinero para crear un banco andaluz que le obedezca ciegamente.
Pues bien, al gobernador del Banco de España, Jaime Caruana, no le gusta la idea. Durante su intervención en el Foro de la Nueva Economía, a mediodía del viernes 11, Caruana remachó su doctrina de que las cajas no deben controlar bancos, entre otras cosas porque, de esta manera, se desvirtúa su naturaleza. Si bien es cierto que Caruana manifestó que el Banco de España todavía no ha respondido a una petición todavía no oficialmente formulada, la verdad es que el gobernador ha puesto tantas pegas que resulta imposible no concluir que el PSOE se va a encontrar con la oposición del supervisor.