- Pagará a la Generalitat 310 millones de euros al contado y otros 120 millones al término de la concesión, dentro de 25 años.
- La Generalitat necesita hacer caja y por eso procede a la venta de Aguas del Ter-Llobregat y de Tabasa y Cadí.
- Mientras que la operación de OHL apenas supuso una salida de caja, ésta sí.
- El Ceo de la compañía, Francisco Reynés (en la imagen), afirmó recientemente tener disponibles unos 1.300 millones de euros de liquidez.
Esta vez, sí que sí. Después de tres meses de incertidumbre, Abertis se ha quedado con Tabasa y Túnel del Cadí. La operación ha costado 430 millones de euros: 310 millones al contado y los 120 millones restantes cuando termine la concesión, en 2038. Para la operación, la compañía ha formado un consorcio con el banco brasileño TGB Pactual. La compañía dirigida por Francisco Reynés participa con el 35% y los brasileños con el 65%. Al mismo tiempo, la concesionaria ha suscrito un contrato de gestión por 25 años.
La operación en sí no llama la atención. Lo que sí sorprende es que no se presentara nadie más al concurso, sobre todo si tenemos en cuenta que, según Abertis, la concesión es rentable. El problema es la situación de los mercados, el riesgo país y que la marca España está 'tocada', aseguran desde la compañía para justificar la falta de competencia.
En cualquier caso, el hecho de que la operación se haya cerrado definitivamente, supone un alivio para la Generalitat, que necesita dinero -y mucho- cuanto antes. Por eso, el Gobierno de Artur Mas ha puesto a la venta Aguas del Ter-Llobregat, y los túneles de Tabasa y del Cadí.
Claro que si entra dinero en la arcas de la Generalitat es porque antes ha salido de las de Abertis, que ve cómo sus 1.300 millones de liquidez -Reynés dixit- se van mermando poco a poco, cosa que no sucedió con la reciente operación con OHL.
Pablo Ferrer
pablo@hispanidad.com
