A tres días de las elecciones en Bolivia, cuando se da por seguro ganador al izquierdista Evo Morales (cocalero, partidario de la nacionalización de empresas, agitador social de primer orden), Emilio Botín ha decidido vender el Banco Santa Cruz, por 31,7 millones de euros. Ha vendido mal y rápido, porque si algo teme Botín no es a los izquierdistas sino a los nacionalizadores. Lula da Silva, por ejemplo, es uno de los ídolo del presidente del SCH, pero Morales es distinto : Morales te pude meter la mano en la cartera.
Repsol YPF, con muchos intereses en Bolivia, ha decidido por el contrario, quedarse. Veremos al final quién tiene razón, y si las responsabilidades de Gobierno cambian a las personas.