El fabricante surcoreano de electrónica apostará ahora por el teléfono LG V20 tras el fracaso del G5. LG, al igual que otros fabricantes de smartphones (como Samsung o Apple), ha bajado sus ventas, en concreto en los modelos de alta gama, lastrando el tercer trimestre. Y es que ha perdido 65 millones de euros, mientras que hace un año ganó 100 millones. La compañía electrónica surcoreana facturó en total 10.613 millones (-5,73%), de los que 2.007 millones (-23%) procedieron de la rama de telefonía móvil. Claro que a este último descenso hay que añadir los costes de reestructuración de la división, que supusieron una pérdida operativa de 350 millones. LG intentará revertir la situación y para ello apuesta por un nuevo smartphone de gama alta -el LG V20-, tras el fracaso del G5. Al mismo tiempo, reforzará las gamas medias y bajas (por ejemplo, con el LG U, que por ahora, sólo saldrá en Corea del Sur). Y es que quiere volver al top 5 de fabricantes, en cuyo podio están Samsung, Apple y Huawei, además de los chinos Oppo y Vivo. Cristina Martín cristina@hispanidad.com