- Todavía no ha informado del impacto de las cláusulas suelo, pero ese no es su principal problema.
- Más importante que ese impacto (300 millones) es el vencimiento de los Cocos de Ceiss (604 millones).
- Si no encuentra un inversor, el FROB se haría con la propiedad de Ceiss… y de Unicaja.
- Pero eso no está en sus planes y la única alternativa sería la venta forzosa a otra entidad.
Unicaja no ha confirmado, a diferencia de otras entidades, del impacto de la sentencia de las
cláusulas suelo. Puede tener una lógica que prefiera esperar pero sorprende, en cualquier caso, que haya comunicado, este martes, un
hecho relevante a la CNMV en el que cuenta las excelencias de la entidad pero sin referencias al riesgo, sobre todo después de la sentencia del
Tribunal de Justicia de la UE.
El impacto de las cláusulas suelo está entre los 250 y 300 millones -algunas fuentes lo elevan a bastante más-, pero no es el principal problema, que sí está en el vencimiento de las
obligaciones convertibles contingentes (los
famosos Cocos) que tendrá que devolver su filial
Ceiss (Caja España-Duero) y que vencen en primavera.
Unicaja Banco ha trasladado este martes a la CNMV la
presentación corporativa que ha puesto en su
página web, en la que sí constan los Cocos, cuyo vencimiento pondría en más de una apuro a
Braulio Medel (
en la imagen), a pesar de que dejó la presidencia de la entidad en
Manuel Azuaga.
El tiempo apremia pero Medel no encuentra comprador para Unicaja. ¿Problemas? La entidad no cotiza, lo que hace muy complicado una
valoración de los activos, pero eso no resuelve nada. Tampoco consigue colocar los Cocos en el mercado, pero si vencen, la conclusión es obvia:
convertirían al FROB en el propietario de Ceiss y, de paso, de Unicaja.
Está claro, sin embargo, que el FROB no está por la labor, a estas alturas de la crisis bancaria, de empezar a
jugar de nuevo y
la consecuencia llegaría por sí misma: abocaría al mismo FROB a la venta forzosa del grupo a otra entidad.
Paradójicamente la presentación corporativa destaca aspectos de Unicaja Banco como la
cuota de mercado en préstamos y depósitos, por ejemplo, o que "es una de las pocas antiguas cajas que
no ha recibido directamente ninguna ayuda estatal", o que "la integración con
España-Duero seguirá generando sinergias significativas".
No deja de sorprender, sobre todo, cuando
casi todas las entidades han salido al paso detallando el impacto de las
cláusulas suelo, un
misterio en el caso de Unicaja. Ayer lunes, sin ir más lejos, pasaron por ese trámite los bancos que cotizan y, como ya informamos, se ponía de relieve la
rebelión del Sabadell, al insistir en la médula del problema; que sus hipotecas son legales.
Y este lunes han hecho lo mismo otras entidades, como
Cajamar,
Ibercaja,
Bankia, las
cajas rurales de Navarra y Granada y hasta el
Deutsche Bank.
Descocemos, por tanto, en el caso de la caja andaluza, el impacto real. ¿Espera a la sentencia del
Supremo, a finales de mes, referida precisamente a Unicaja? Es, de hecho, uno de los
fallos paralizados tras la decisión del tribunal europeo y está pendiente desde abril.
Lo único aclarado hasta ahora es una aportación adicional de 150 millones de euros, pero sin estar claro a cuánto asciende la
contingencia ya cubierta. Por eso precisamente es complejo aventurar el efecto, a su vez, en las cuentas de 2016.
Desde la entidad han confirmado que las mayores dotaciones ya están hechas en ejercicios anteriores, pero eso no evita echar un vistazo a los últimos resultados. En 2015, el último ejercicio completo, ganó 185 millones en 2015, y en 2016, hasta septiembre, 195 millones.
No obstante, el
negocio típico (para el que sirve el referente del
margen de explotación) fue de 387 millones, frente a los 531,3 millones del periodo anterior. Dicho de otro modo, bajaban los márgenes, como en otras entidades, y las cláusulas suelo pueden suponer una
buena mordida al beneficio anual o pueden, incluso, la entrada en pérdida, salvo que se encuentre el modo de evitarlo.
El último dato sobre las
cláusulas suelo se remonta a 2013, cuando la Unicaja señaló, en el
folleto continuado que acompañaba la
oferta por Banco Ceiss que "a 30 de junio de 2013, aproximadamente el 25% del crédito a la clientela de
Unicaja Banco está constituido por
préstamos hipotecarios con cláusulas suelo activas" (página 20). El saldo entre
Unicaja y Ceiss ascendía a casi 7.000 millones de euros.
Toca esperar. Eso sí, la propia
Unicaja destacaba en los
últimos resultados que había reforzado su solvencia, con una elevación de sus coeficientes de capital. El ratio
CET1 (capital ordinario de primer nivel) aumentó al 13,7% y el CET1
fully loaded ascendió al 12,3%.
Rafael Esparza