• No obstante, la constructora va recuperando la normalidad con unos ingresos de explotación que aumentan un 2,6%.
  • Y el Ebitda crece un 7,4%.
  • El problema sigue siendo el mismo: ¿Qué ocurrirá en enero de 2018, cuando tenga que hacer frente a los 1.629 millones de la deuda asociada a Repsol?
  • Por eso, Manrique confía en una subida de la cotización de la petrolera para poder vender su participación del 8,5%.
Sacyr ha cerrado el primer trimestre del año con un resultado bruto de 52,9 millones de euros, muy superior a los 8,7 millones registrados en 2015. Ahora bien, el 70% de esos 52,9 millones (37 'kilos') vienen de Repsol, del 8,5% que tiene de la petrolera. Es mucho y muestra la Repsol-dependencia de la compañía que preside Manuel Manrique (en la imagen). No obstante, también es cierto que Sacyr va recuperando la normalidad. Las cifras difundidas este viernes muestran que los ingresos de explotación, los recurrentes, aumentaron un 2,6%, hasta alcanzar los 693,5 millones de euros. Los gastos externos y de explotación también aumentaron, pero sólo un 1,9%, lo que arrojó un Ebitda de 80,6 millones de euros, un 7,4% superior al del mismo periodo de 2015. Por áreas de negocio, la que más aportó al Ebitda fue Concesiones, con 46,8 millones de euros, un 6,5% más que en 2015, seguida de Construcción (13,1 millones), que registró un retroceso del 26,4%, y Servicios, que aportó 14,2 millones, un 2,2% menos que un año antes. La que más creció fue Industrial ( 56,8%), aunque su aportación sigue siendo pequeña (6,8 millones). No se nos olvida la deuda, que durante el primer trimestre aumentó en algo más de 70 millones de euros, hasta los 4.223. Ahora bien, el problema no es ese. El mayor quebradero de cabeza de Manrique es la deuda asociada a Repsol, que asciende a 1.629 millones de euros y que, y esto es lo más preocupante, vence el 31 de enero de 2018. Es decir, llegada esa fecha, Sacyr tendrá que desembolsar 1.629 millones. Por eso, el presidente del grupo confía en una subida de la cotización de la petrolera para poder vender su participación del 8,5%. En otras palabras, Manrique no venderá Repsol hasta que no supere los 15,5 euros. Este viernes, los títulos de la petrolera se intercambian a 11,3 euros. Pablo Ferrer pablo@hispanidad.com