- Sin la filial británica, el beneficio del grupo habría caído un 9,4% en lugar de crecer un 0,3%.
- El margen de intereses se muestra firme: aumenta un 19,8% (un 4,6% sin TSB).
- Tenía que llegar: la importante reducción del ROF provoca la caída del 12,4% del margen bruto.
- El banco prevé el cierre de 250 oficinas y la reducción de entre 700 u 800 empleos hasta el verano, pero sin medidas traumáticas.
- La aventura portuguesa se ha cerrado con una minusvalía de 8,3 millones de euros.
- Provisión total por las cláusulas suelo: 490 millones.
- Y todo esto con una cotización a la baja. Ha pasado de los 3 euros en 2012 a los 1,37 de ahora.
No oculto la expectación que desde hace días me está suscitando la presentación de
resultados del Sabadell. De las grandes entidades financieras del país es la que, a priori, me da la sensación, que
tanto en el plano político como en el financiero, presenta unas incertidumbres que debían de preocupar, tanto al regulador como a los inversores. Al regulador, porque no se le puede ir de las manos una entidad de este tamaño y a los inversores, porque no se deben quedar dentro de la red de una acción con una
cotización a la baja, -valía 3€ en 2012 y este jueves ha cerrado en 1,37€ -. Y si no que se lo pregunten a la familia Lara, de
Planeta, que compró a través de la sociedad
Jaipur un 6% del banco en su mejor momento y en 2015, el 'agujero' generado por la depreciación de la inversión ascendía a 255 millones de euros (M€).
Los datos que presenta el banco este viernes están en línea
con los ya presentados en los trimestres anteriores. Lo primero que llama la atención es la clara incidencia de la adquisición del
banco inglés TSB ya que sin él, los 710,4M€ de
beneficio neto reportado, que significa un ínfimo incremento de un 0,3% respecto al 2015,
hubiese sido un importante fiasco de 55,3M€ menos que el pasado ejercicio. Por tanto, la primera deducción de estas cifras puede ser que TSB aporta 179,3M€ al beneficio del grupo en este ejercicio.
Ya veremos lo que sucede en los sucesivos con la tormenta perfecta que puede provocar el
Brexit.
Como ya comenté en el tercer trimestre acerca de la diferencia entre la cantidad y la calidad del crecimiento,
en este último trimestre el crecimiento del margen de intereses se ha mostrado firme ya que, respecto al 2015, ha crecido un 19,8%, unos 634,9M€. Sin el
TSB, el aumento solo ha sido del 4,6%. El margen bruto ex TSB se ha visto reducido en un 12,4% por la importante reducción de los resultados de operaciones financieras (ROF), que se han dejado 0,7M€ en el ejercicio presente.
Por su parte,
los gastos de explotación solo han crecido un 0,5% ex TSB, reflejo de la reestructuración de la entidad, que prevé para este 2017 el cierre, durante el primer semestre, de 250 oficinas, un 12% del total de la
red actual, lo que conllevará una reducción de plantilla de entre 700 a 800 empleos, que se pretende sea no traumático mediante
recolocaciones en las oficinas restantes o no cubriendo bajas.
El capítulo de provisiones para insolvencias y otros deterioros
se ha visto reducido respecto a 2015 en 934.133 ex TSB, mientras que este último creció 28,1M€ en comparación al mismo periodo del año anterior.
Los ratios de morosidad se han situado en el 7,72% sin TSB y en el 6,14% para el total del grupo, que indica la mejor calidad del riesgo aportado por la filial británica. La cobertura de
morosos se sitúa en el 51,5% y durante el 2016 se han utilizado 1.894M€ de provisiones constituidas por morosidad total de créditos.
También ha entrado en la cuenta de resultados de 2016 la minusvalía de 8,3M€ de la venta de la participación del 4,08% en el
Millennium BCP por 44,4M€,
la aventura portuguesa del Sabadell.
El chaparrón de las
cláusulas suelo, a pesar de que el banco se obstina en anunciar que la totalidad de estas cláusulas en sus préstamos estaban perfectamente informadas y, por tanto, son legales, le ha supuesto 490M€ en
provisiones repartidas en diferentes ejercicios desde la sentencia contraria en los tribunales.
A pesar de las barbaridades que se han publicado sobre las previsiones de resultados al cierre -el jueves llegue a ver una de 59M€ de beneficios-, la entidad, de momento ha mostrado músculo, cuando menos
en el primer ejercicio de consolidación con TSB. Las previsiones, ya veremos, pues las incertidumbres están ya aquí. El Brexit, la deriva independentista, para la que Oliu ya anunció que están preparados para un cambio de
sede social que les permita "el cobijo legal de la UE", la reestructuración en marcha y
los tanteos de absorciones son las primeras con las que se ha de encontrar en pocos meses. Esperemos que el 'seny' catalán sepa cómo afrontarlas con éxito.
Rodrigo de Silos
rodrigode@hispanidad.com