Tras la crisis bancaria de 2007, arrastras hasta hoy -que todavía no ha pasado- el Banco Central Europeo (BCE) ensayó en España, país débil, con un Gobierno débil y siempre dado a la guerra civil más que a la unidad frente al exterior, lo que la JUR y Francfort pretendían fuera un sistema eficaz de resolución de entidades bancarias en dificultades.

Y así, en el trascurso de unas horas, tras forzar la liquidez de la entidad, decidieron que el Banco Popular, que valía 1.300 millones de euros en bolsa, se regalara por un euro al Banco Santander. Así, no había coste para el erario público, todo quedaba en España, sólo que en manos de otro consejo, también español.

El magistrado empieza a dar pábulo a la teoría ‘conspiranoide’ del Banco Central Europeo (BCE) contra España

Ahora estamos con José Luis Calama el juez que ha emitido una providencia citando a declara a Ana Botín, presidenta del Santander (VER DOCUMENTO ADJUNTO), y al ya casi jubilado Rodrigo Echenique, su hombre de confianza y expresidente del Banco Popular tras la absorción.

A petición de una acusación, ciertamente, pero, tras llamar a Sebastián Albella, hoy presidente de la CNMV y el hombre que aplaudió la ampliación de capital del Popular con Ángel Ron como presidente, desde un despacho de abogados privado, y del entonces ministro de Economía y hoy vicepresidente del BCE, Luis de Guindos, también como testigos, la citación a Ana Botín sólo puede explicarse como una prueba de que el magistrado empieza a creerse lo que en un principio se calificó como teoría conspiranoide: que el BCE había intervenido un banco sin necesidad alguna pero con la connivencia del Gobierno español para ejercer como eso, como banco de prueba ante futuras crisis bancarias.

El Popular fue el conejillo de indias para ensayar la liquidación de bancos en Europa. Por supuesto, no sirvió para nada

El Popular fue el conejillo de indias para ensayar la liquidación de bancos en Europa. Por supuesto, no sirvió para nada.

Y la citación pone en un brete a la propia Ana Botín y a la inconmensurable Elke König, de la JUR. Porque claro, eso de que el Popular se otorgó al Santander en una tarde-noche y eso de que el titular de Economía, Luis de Guindos, se enteró por una llamada telefónica a las 3 de la madrugada, pues mire usted, resulta un poco difícil de creer. Ninguna religión, ningún credo, ninguna ideología, resulta tan ferozmente exigente.