- Gimeno se ha visto obligado a ceder demasiado.
- Cuentas del ejercicio 2014-2015: en El Corte Inglés funcionan los ingresos pero no el margen.
- Las hijas de Isidoro entran en el Consejo y salen los sucesores del mayor de los hermanos Areces.
- En cualquier caso, el mayor peligro sigue siendo la operación Qatar. Aún sin acciones, entra el jeque.
- Y luego la guerra con Ceslar: legalmente, no se puede echar del Consejo a quien posee -sin contar presumibles apoyos- un 10% del capital.
Junta General de Accionistas de El Corte Inglés. Al Final, Dimas Gimeno (en la imagen) ha tenido que ceder en todo menos en el control de la gestión del día a día. Y hablando de gestión: ¿las cuentas de El Corte Inglés se enderezan tras la crisis? Sí en cuanto a ingresos, no en cuanto a márgenes. Es más, es el momento de cerrar las inversiones fallidas de los últimos años de Isidoro Álvarez antes de lanzarse a potenciar las áreas que funcionan bien y la necesaria internacionalización. Vamos con el Corporativo. En efecto, Gimeno, al que sigo considerando la esperanza de futuro de los grandes almacenes, ha tenido que ceder en dos aspectos vitales, pero es que, recordemos, sólo posee el 7,5% del capital. El primero es la salida de Ceslar (10% del capital). Esto significa que lo que ha ocurrido en El Corte Inglés es lo siguiente: han entrado las hijas de Isidoro Álvarez y han salido los herederos del mayor de los hermanos Areces, Luis. Pero en cuestiones corporativas, lo más grave es lo de Qatar. Entra ya en el Consejo antes de ser accionista, previa entrega de 1.000 millones de euros, una cantidad que El Corte Inglés deberá remunerar, que le convertirá en un consejero que siempre resultará incómodo, que le obligará a salir a bolsa (ahora mismo eso no le conviene nada a El Corte Inglés) y que, atención, en ningún caso solucionará la crisis de deuda de los grandes almacenes. Sí que se está haciendo un esfuerzo en grande en reducir la deuda directa, hasta la mitad (se queda en algo más de 2.000 millones de euros) pero a eso hay que añadirle las emisiones comprometidas, que son tan deuda como cualquier otra. Sí, Gimeno está enderezando la gestión peor hay que dejarle hacer. No puede ser un presidente tutelado. Eulogio López eulogio@hispandidad.com