- Esa es la idea del Ministro de Industria, José Manuel Soria.
- Y en un estudio de Boston Consulting Group se advierte de que ampliar los incentivos de la norma podría conducir a otro déficit de tarifa superior a los 1.800 millones de euros anuales.
- Todos los partidos políticos con representación parlamentaria se han comprometido a modificar el Real Decreto aprobado el pasado 9 de octubre.
El ministro de Industria, Energía y Turismo y principal hacedor del Real Decreto 900/2015,
José Manuel Soria, lo tiene clarísimo: si la potencia contrata por un particular es inferior a 10kW, es
autoconsumo. Ahora bien, si supera ese umbral se considera que está vendiendo energía. Es decir, se considera que es negocio y, como tal, debe pagar.
Esa es, como decimos, el principio básico que sostiene
Soria y la línea maestra del RD de
autoconsumo, aprobado por el Gobierno el pasado viernes 9 de octubre. Según los expertos, la norma plantea el asunto de una manera equilibrada, esto es, evita que se produzcan grandes desviaciones entre los ingresos y los costes del sistema (¿les suena?).
En este sentido, un estudio de
Boston Consulting Group señala que el impacto del
autoconsumo alcanzará los 640 millones de euros en caso de que esta práctica llegue al 10% de cuota de mercado. Se trata de un impacto perfectamente asumible por el sistema, aunque las estimaciones en cuanto a la penetración del
autoconsumo en España no son tan espléndidas. El sector no espera que llegue, si quiera, al 5%.
En cualquier caso, el informe también alerta sobre el impacto que podría tener ampliar los incentivos para esta práctica. Concretamente, el agujero podría llegar a los 1.844 millones de euros anuales. En ese caso habría dos opciones: cambiar la ley para poder generar (otra vez) déficit de tarifa, o aplicar ese desfase directamente en la factura de la luz, lo que supondría aumentar el recibo hasta un 6,3%.
Y esto no es baladí, sobre todo si tenemos en cuenta que nada más aprobarse el decreto, todos los partidos con representación parlamentaria –excepto el PP, claro- firmaron un documento en el que se comprometen a rectificar la norma si llegan al poder tras las elecciones.
Por cierto, pasarse al
autoconsumo no está al alcance de cualquiera. Para empezar, hace falta poseer una vivienda unifamiliar con una superficie adecuada para la instalación de las placas solares, ya sea el tejado o la misma parcela. Además, hay que comprar los paneles. Dos opciones: adquirir unos muy baratos pero muy malos, o comprar unos que verdaderamente merezcan la pena y que cuestan alrededor de 10.000 euros. Hagan números.
Pablo Ferrer
pablo@hispanidad.com