• Cita anual desde que en 1973 se legalizó el aborto, el cual se ha cobrado la vida de 58 millones de bebés en USA.
  • Es decir, una media de 1,32 millones de bebés al año, el triple de los nacidos en España en 2015.
  • Por primera vez acude un vicepresidente. Mike Pence se considera "cristiano, conservador y republicano, en ese orden".
  • Asegura que "la vida está ganando terreno en EEUU" y no descansarán hasta restaurar la cultura de la vida.
  • Esta semana, se presentará un proyecto de ley para redirigir subvenciones de Planned Parenthood a otros centros.
  • La mayor multinacional del aborto mata un no nacido cada dos minutos y ya lleva más de siete millones de bebés desde 1973.
El pasado viernes, tuvo lugar la Marcha por la Vida en Washington y fue todo un éxito. Y es que contó con el apoyo de la Casa Blanca, a pesar del boicot feminista que los provida recibieron unos días antes y del silencio mediático. Una cita que se celebra cada año en EEUU desde que en 1973 el Tribunal Supremo legalizó el aborto. En estos 44 años, el aborto se ha cobrado la vida ni más ni menos que de 58 millones de bebés. Es decir, una media de 1,32 millones de bebés cada año, el triple de los nacidos en España en 2015 (419.109). Por primera vez acude un vicepresidente. Mike Pence es "cristiano, conservador y republicano, en ese orden", como él mismo dijo hace unos meses (ver enlace). Asegura que "la vida está ganando terreno en EEUU" y no descansarán hasta restaurar la cultura de la vida". Además, también asistió Kellyane Conway, jefa de campaña de Trump y ahora la asesora presidencial más relevante, por lo que parece que el derecho a la vida renace en EEUU. En este sentido, ya se están dando pasos en la Administración Trump. Una de las primeras medidas de Donald Trump como presidente ha sido impedir que fondos públicos financien organizaciones que promueven o realizan abortos en el mundo. También retirará los fondos a la multinacional abortista Planned Parenthood, como explicó Paul Ryan, presidente de la Cámara de representantes de EEUU, (ver enlace). De hecho, esta semana, la senadora Joni Ernst presentará un proyecto de ley "para redirigir las subvenciones de Planned Parenthood a verdaderos centros de cuidado de la salud de mujeres", como recoge Aciprensa. Todo esto no es baladí porque una instalación de Planned Parenthood es "el lugar más peligroso hoy en EEUU para una niña o un niño no nacido", según afirmó el congresista Chris Smith en la Marcha por la Vida. Y es que destruye uno "cada dos minutos y ha matado más de siete millones desde 1973". Y es que algo ha empezado a cambiar desde que Trump preside EEUU: dio su apoyo a la manifestación provida a través de Twitter, y respaldó la presencia de Pence, que acudió a título personal y gubernamental. Sin embargo, las feministas fueron poco democráticas con los provida. En la Marcha de las Mujeres del 21 de enero, vetaron la participación de varias asociaciones provida, pues entre sus reivindicaciones estaban los derechos reproductivos de las mujeres. Además, hay que subrayar que esta manifestación tuvo mucho más eco mediático en EEUU y en España que la Marcha por la Vida, que fue silenciada por varios medios públicos y cercanos al PP, como informa Actuall. Cristina Martín cristina@hispanidad.com