• Hablamos en términos relativos, según el tamaño de las entidades.
  • El impacto bruto en el banco cántabro podría alcanzar los 202 millones de euros y reduciría su ratio de capital fully loaded en 87 puntos básicos.
  • Precisamente, el gran temor del sector es que el TS decida aplicar la retroactividad total de las cláusulas suelo.
  • Una decisión que podría dificultar aun más el beneficio de 2016.
Es el gran temor del sector financiero: que el Tribunal Supremo decida, finalmente, que la nulidad de las cláusulas suelo debe afectar a todas las hipotecas y no sólo a las firmadas desde el 13 de mayo de 2013. Ahora bien, el temor va por barrios y no es igual en todas las entidades. De hecho, el más preocupado es Liberbank. En términos relativos, el banco que dirige Manuel Menéndez (en la imagen) sería el más afectado por la retroactividad de las cláusulas suelo. Al cierre del tercer trimestre de 2015, la entidad tenía créditos hipotecarios con cláusulas suelo activas por un total de 2.600 millones de euros, esto es, el 10,1% del total de sus préstamos, el mayor porcentaje del sector. Ojo, hablamos únicamente de bancos que cotizan en bolsa. Es decir, si Liberbank tuviera que suprimir las cláusulas suelo de todas sus hipotecas, el impacto bruto en sus cuentas sería de unos 202 millones de euros -el impacto neto sería de 141 millones-, lo que reduciría su ratio de capital fully loaded en 87 puntos básicos, hasta el 11,13%. Precisamente, el banco cántabro fue el que registró un mayor ratio de capital (12%) al cierre del tercer trimestre de 2015. Las otras dos entidades más afectadas, en términos relativos, serían el Sabadell y el Popular. Curiosamente, estos tres bancos son los únicos que aún mantienen las cláusulas suelo en sus hipotecas. Están a la espera de la decisión del TS. Así, los créditos hipotecarios del Sabadell con cláusulas suelo activas ascienden a 10.800 millones de euros, el 7,2% del total de sus préstamos. La eliminación retroactiva de las cláusulas suelo tendría un impacto bruto de 515 millones de euros aproximadamente (360 millones netos) y supondría una reducción de 42 puntos básicos de su ratio de capital fully loaded, que se situaría en el 10,98%. En cuanto al Popular -tiene hipotecas con cláusulas suelo activas por 6.900 millones de euros, el 6,3% del total de sus préstamos-, el impacto sería algo menor: 450 millones de euros brutos (315, netos) y una disminución del ratio de capital de 40 puntos básicos, que situaría su fully loaded en el 10,20%. A la luz de estas cifras se comprende el temor de la banca, sobre todo de aquellas entidades que han decidido mantener las cláusulas suelo hasta conocer la decisión final del TS. De momento, como adelantó Hispanidad, ya sabemos que el pasado 26 de enero, un juez de Vic (Barcelona) aplicó la retroactividad para anular una cláusula suelo. Su argumento: el sistema financiero ya no corre peligro. Seguramente sea así. Ahora bien, la decisión del TS podría dificultar aun más el complicado beneficio de 2016. Pablo Ferrer pablo@hispanidad.com