Evo Morales quería perpetuarse en el poder...
El presidente boliviano, Evo Morales, renunció el domingo a su cargo tras ser acusado de fraude en los comicios de octubre en los que fue reelegido por cuarta vez. Ha sido presidente de Bolivia desde el 22 de enero de 2006 hasta el 10 noviembre de 2019, cuando presentó su dimisión.
La renuncia del líder indigenista, anunciada por televisión, se produjo horas después de que llamara a nuevas elecciones, presionado por un informe difundido en la madrugada del domingo por la Organización de los Estados Americanos (OEA) en el que señalaba que había encontrado “irregularidades” en los comicios de octubre, explica Reuters.
Por la noche, Morales -que denunció un “golpe de Estado”- dijo que la policía busca detenerlo de forma ilegal. “Grupos violentos asaltaron mi domicilio. Los golpistas destruyen el Estado de Derecho”, afirmó también Morales en su cuenta de Twitter.
Las protestas de los últimos días han dejado al menos tres muertos, decenas de heridos y cientos de detenidos
Los disturbios se extendieron esta misma noche por varias ciudades del país, tras la renuncia de Morales, con incendios, saqueos a comercios y ataques a casas de políticos y periodistas, una de ellas del propio expresidente, según recoge Infobae.
Las protestas de los últimos días han dejado al menos tres muertos, decenas de heridos y cientos de detenidos, según Aciprensa.
Horas después, el jefe de la Policía, Yuri Calderón, dijo en una entrevista telefónica con un canal de televisión que no hay orden de detención contra Morales y agregó que desconoce su paradero.
Como se recordará, el mandatario, que asumió el poder en 2006, había ganado las elecciones del 20 de octubre. Sin embargo, una inexplicable pausa en el conteo de votos de casi un día, provocó acusaciones de fraude y generó protestas de la oposición, huelgas y bloqueos de carreteras.
El jefe de la Policía, Yuri Calderón, dijo en una entrevista telefónica con un canal de televisión que no hay orden de detención contra Morales y agregó que desconoce su paradero
Finalmente, el informe preliminar de la OEA, que realizó una auditoría de los comicios, dio cuenta de inconsistencias en el proceso de octubre y recomendó realizar nuevas elecciones de forma transparente.
“Se encontraron irregularidades, que varían desde muy graves hasta indicativas. Esto lleva al equipo técnico auditor a cuestionar la integridad de los resultados de la elección del 20 de octubre pasado”, señaló el organismo en un comunicado de prensa en el que también habló de “manipulación”.
Según el informe, resulta “estadísticamente improbable” que, pese a ganar los comicios, Morales haya obtenido los 10 puntos porcentuales necesarios para evitar una segunda vuelta con el liberal Carlos Mesa, quien resultó segundo.
Mesa celebró “el fin de la tiranía” tras la renuncia de Morales. “A Bolivia, a su pueblo, a los jóvenes, a las mujeres, al heroísmo de la resistencia pacífica. Nunca olvidaré este día único. El fin de la tiranía. Agradecido como boliviano por esta lección histórica. Viva Bolivia!!!!!”, publicó Mesa en Twitter.
Lo que sucede en Bolivia no es un golpe de estado, lo decimos a los ciudadanos bolivianos y a toda la comunidad internacional", dicen los obispos
La Conferencia Episcopal Boliviana, los representantes de la comunidad de ciudadanos, los comités cívicos del país y CONADE (Comité Nacional para la Defensa de la Democracia), se reunieron para analizar la situación creada, sin precedentes en el país. De esta reunión surgieron las primeras conclusiones, enviadas a Fides: "Lo que sucede en Bolivia no es un golpe de estado, lo decimos a los ciudadanos bolivianos y a toda la comunidad internacional. Lanzamos un llamamiento por la paz a todos los bolivianos, pedimos no a comprometerse actos de vandalismo, venganza o cualquier cosa de la que podamos arrepentirnos. Todos tenemos la seria obligación de defender la vida de todos los bolivianos, en nombre de Dios les decimos: detengan los actos de violencia y preserven la vida y la paz. y volver a tener ese espíritu pacífico que reinaba en el pueblo. Pedimos a la policía nacional y a las fuerzas armadas que cumplan urgentemente su papel constitucional en la defensa de la propiedad y las personas, preservando la vida y la libertad de todos”.
"Todos estamos de acuerdo -continúa el documento- al proponer a la Asamblea Nacional de Bolivia una solución constitucional y pacífica, tener un presidente constitucional en poco tiempo con la tarea de formar un nuevo tribunal electoral y llevarnos a nuevas elecciones para que Todas las personas pueden expresar su opinión en libertad y paz. Dios nos protege en este momento y nos inspira sentimientos de paz y fraternidad ".
Tras conocerse la renuncia de Morales, el dictador venezolano, Nicolás Maduro, condenó lo que consideró un “golpe de Estado” contra el mandatario boliviano. El presidente electo de Argentina, el peronista Alberto Fernández, otro aliado de centroizquierda de Morales, calificó del mismo modo los sucesos en Bolivia en su cuenta de Twitter. Por su parte, el canciller de México, Marcelo Ebrard, dijo que su país estaría dispuesto a ofrecer asilo a Morales.