- Los créditos fiscales, las menores provisiones y el recorte de gastos permiten aumentar el beneficio un 22% en el tercer trimestre.
- Los analistas esperaban más del mayor banco de EEUU por activos y la cotización cae un 1,14%.
- El Ceo Dimon da por bueno el tercer trimestre: "Hemos tenido unos resultados decedentes".
Los resultados del tercer trimestre de
JP Morgan Chase han sido peores de lo que esperaban los analistas. Y como la cotización bursátil está íntimamente relacionada con el sentir de los analistas, los títulos del mayor banco norteamericano por activos cayeron el martes un 1,14%.
Ciertamente, los
números presentados el martes por la entidad no son buenos. Se quedan en "decentes", según el propio consejero delegado,
Jamie Dimon (
en la imagen). Ahora bien, marcan el 'camino' al resto de entidades financieras del mundo global.
Veamos: durante el tercer trimestre del año, el banco ingresó 23.535 millones de dólares (unos 20.600 millones de euros), un 6% menos que en el mismo periodo de 2014. La culpa la tiene la caída de la actividad de la banca corporativa y de inversión, cuyos ingresos bajaron un 10%, y cuyos beneficios fueron de 1.464 millones de dólares (unos 1.280 millones de euros), un 13% inferiores a los de 2014.
Tampoco ha ayudado a los resultados del grupo el negocio de hipotecas cuyos ingresos han descendido un significativo 23%.
Ahora bien, y a pesar de todo esto, la entidad ha ganado 6.804 millones de dólares (unos 5.960 millones de euros), un 22% más que un año antes. ¿Cómo es posible? Gracias a los atípicos, es decir, a los 2.200 millones de dólares (1.900 millones de euros) de
beneficios fiscales, a las provisiones, que han disminuido un 10%, hasta los 682 millones de dólares (598 millones de euros) y al recorte de gastos.
Pablo Ferrer
pablo@hispanidad.com