Triple 9 es un buen intento de realizar cine negro actual. Llena de acción, es muy claustrofóbica e intensa en su desarrollo. Una cruel mafiosa rusa, cuyo esposo se encuentra en prisión, encarga, para intentar liberarlo, un golpe casi imposible a una banda de atracadores de bancos formada por policías corruptos y ex soldados de las fuerzas especiales. Las temibles acciones llevadas a cabo por estos amorales individuos están siendo investigadas por un veterano sargento de policía quien recibe en su distrito, con los brazos abiertos, a su joven sobrino: un agente intachable. Lo que ambos desconocen es que éste, por circunstancias del destino, está en la diana de ese peligroso y violento grupo de delincuentes. John Hillcoat, realizador de películas de culto como La carretera y Sin ley, se interesó por este retrato  del lado oscuro de las fuerzas de la ley y las peligrosas organizaciones que manejan los entresijos de las grandes ciudades. Con este armado argumento atrajo a un reparto coral de lujo, cada uno de los cuales tiene su momento de gloria. Del mismo destacan dos intérpretes que han cambiado de registro totalmente respecto a su filmografía anterior: es el caso de Casey Affleck, acostumbrado a encarnar papeles de malvado que aquí se mete en la piel de un honrado y valiente policía y, en el polo opuesto, Kate Winslet, en esta ocasión convertida en una despiadada mafiosa de  "look" provocativo y algo "macarra". De sordidez gratuita y violencia desmesurada, esta película apela a la lealtad y plantea dos preguntas sencillas y claras: ¿Hasta dónde sería capaz de llegar un policía por salvar la vida de un compañero? Y, en el otro extremo de la balanza, ¿que sería lo peor que podría llegar a hacer? Para: Los aprecien las películas de acción con guiones inteligentes aunque contengan escenas violentas y sórdidas Juana Samanes