El conocido actor Dany Boon, actualmente el intérprete mejor pagado en el país galo, encarna a un tacaño de manual llamado François Gautier. Un violinista de gran talento que no disfruta de la vida porque todo cuesta dinero, de tal forma que su único amigo y confidente es el paciente director de su banco. Pero en un corto espacio de tiempo este individuo verá cómo todo se convulsiona cuando se enamora de una atractiva compañera de trabajo, que desconoce su naturaleza miserable, y aparece por sorpresa una hija natural que le tiene idealizado debido la versión filantrópica con la que su madre le ha "adornado" para justificar su ausencia. Lo mejor de esta comedia es que juega, sin complejos, a entretener y a provocar la carcajada. Se trata de la cuarta película del director  Fred Cavayé quien, en su corta carrera profesional, se ha convertido en el cineasta francés cuyos thrillers han tenido más remakes; el más conocido el de su película Pour elle (titulada en España Cruzando el límite) que el oscarizado cineasta Paul Haggis revisionó en su filme de suspense Los próximos tres días. Plagada de gags cómicos continuos, esta comedia resulta muy simpática y graciosa por la exageración con la que se describe el comportamiento ruin de ese individuo, que se cronometra bajo la ducha, que vive en la oscuridad para no gastar luz o que utiliza preservativos caducados (el único "chirrido" grosero de esta comedia blanca). No obstante, Manual de un tacaño aprovecha, también,  para lanzar  pequeñas "cargas de profundidad" sobre la importancia del amor en la vida o la paternidad y para descubrirnos que lo más preocupante de nuestro protagonista no es la obsesión que tiene por el dinero sino la mezquindad de la que hace gala en las relaciones personales  donde es incapaz de ser generoso con los demás. Para: Los que les gusten las comedias francesas de argumento sencillo pero gracioso y entretenido Juana Samanes