Concebida en su origen como un blog, en el que los padres de un niño con síndrome de Down querían transmitir las sensaciones que les provocaba esta nueva aventura en sus vidas, al final se ha concretado en un emotivo docudrama. Narrada en imágenes como un diario por sus progenitores, este documental (que ya suena para los Goya) cuenta la historia de Jan, un niño con Síndrome de Down, desde su nacimiento hasta los seis años. La película, rodada en la mayoría de las ocasiones con cámara en mano, sigue paso a paso sus avances y su lucha ante su discapacidad psíquica. El largometraje deja claro, desde las primeras imágenes, que el amor, con mayúsculas, es la mejor medicina para lograr que un ser humano sea feliz, al mismo tiempo que provoca una reflexión: estos niños, al igual que los demás, devuelven a sus padres más de lo que reciben. Bernardo Moll, padre de Jan, produce y dirige esta película ayudado por Monica Vic, actriz y madre del pequeño. Para: Los que les gusten las películas realistas pero positivas Juana Samanes