En la Bélgica de nuestros días, el joven Ahmed, de 13 años, se encuentra en la encrucijada de hacer cumplir los ideales de pureza de un “buen musulmán” que le dicta su imán o tener una vida más occidentalizada.  

Los conocidos directores belgas, Hermanos Dardenne, llevan tres décadas haciendo películas realistas, cercanas al documental, donde plasman situaciones actuales preocupantes en temas sociales, políticos o económicos. En esa línea con El joven Ahmed abordan la violenta irrupción del yihadismo en Europa, con las trágicas consecuencias que todos conocemos.

Con una cámara pegada prácticamente al cogote del muchacho, un actor novato, seguimos las andanzas de un adolescente belga, de padre musulmán, que es captado y radicalizado por el imán de su mezquita, lo que le lleva a intentar perpetrar un asesinato. Ni el amor de su madre ni la educación parecen funcionar con él para integrarle en la comunidad en la que vive. De hecho, bajo su equivocado concepto de lo que es “un buen musulmán”, las mujeres de su vida son sus enemigos: su profesora, su compañera de trabajo en una granja e, incluso, su propia progenitora.

El enfoque tan veraz de la película les ha valido por el momento a los Dardenne ser premiados en el  Festival de Cannes con el premio a Mejor Dirección y en la SEMINCI con los premios a Mejor Guion y Mejor Montaje. Por el contrario, la parte negativa es que en la red multitud de fanáticos les han amenazado.

Para: los que les interese reflexionar sobre los problemas que amenazan Occidente. Por ejemplo, el fanatismo islámico.