Primera incursión en animación 3D de los magníficos estudios japoneses Ghibli, responsables de películas tan memorables como El viaje de Chihiro, La princesa Mononoke o El castillo ambulante. Para este nuevo proyecto han elegido una historia dirigida a los más pequeños de la casa, en la que una deliciosa niña huérfana, que tiene la habilidad de manipular a los demás para hacer lo que ella quiere, se enfrenta a la aventura de su vida cuando es adoptada por una extraña pareja.

Sin nada que objetar a la animación, que es bonita, y a pesar de que es un cuento simpático y agradable para los niños, debido a la encantadora personalidad de la protagonista, decepciona un poco porque esperábamos más viniendo de Ghibli y sus autores (está dirigida por  Goro Miyazaki, hijo del genial  Hayao Miyazaki). La razón es sencilla: no supone un derroche de imaginación y plasmación audiovisual como ocurría con las películas de Hayao sino que su desarrollo no depara demasiadas sorpresas argumentales. Da la impresión que más bien se ha gestado como si fuera el capítulo preliminar de una serie televisiva. El tiempo nos dará o no la razón.

Supone una traslación al cine del libro homónimo de la escritora británica Diana Wynne Jones.

Para: los que les gusten las películas de dibujos animados que sólo pretenden el entretenimiento.