Llega a las salas de cine el superhéroe de humor más cínico y verborrea sin filtro, conocido como Deadpool (Masacre). Los superhéroes de Marvel Comics también pueden ser gamberros, un buen representante de ello es Wade Winston,  nombre real de Deadpool, un singular mutante tan peleón como Lobezno pero más irreverente. A través de un montaje ágil, en este primer filme como protagonista conocemos cómo llegó a convertirse en un superhéroe que busca la venganza mientras aspira a recuperar  su antiguo físico y a su amor verdadero, tras quedar totalmente desfigurado por la ciencia. Ryan Reynolds se mete en la piel, y en las mallas, de este singular personaje, creado por el artista Rob Liefeld y el escritor Fabian Nicieza. Este largometraje de acción cuenta con gags ingeniosos, donde Deadpool se ríe hasta de su propia sombra pero es excesiva en situaciones groseras y abusa de un zafio vocabulario, presumiblemente gracioso. Para: Los que les gusten las películas gamberras y no les importe las dosis de grosería que suelen encerrar Juana Samanes