El salvaje atentado del 11-S no dejó a los estadounidenses fuera de juego, muy al contrario sólo pasaron unos días cuando mandaron a Afganistán a un equipo de Fuerzas Especiales para responder al ataque, ya que todos los datos apuntaban a que el responsable de ellos se encontraba en ese país. Los hechos reales, ahora desclasificados, se concentraron en una misión cuyo nombre clave era Fuerza Operativa Daga.

En los días posteriores al 11-S, un equipo de Fuerzas Especiales estadounidense comandado por el capitán Mitch Nelson es elegido para ser los primeros soldados americanos en responder al ataque. El equipo es trasladado a las remotas y yermas tierras del norte de Afganistán, donde deberán convencer al general Abdul Rashid Dostum para unir fuerzas y luchar contra su adversario común: los talibanes y Al Qaeda. Para ello, los americanos deberán adoptar las tácticas de los soldados afganos a caballo y aprender a respetarse y confiar entre ellos ante un enemigo despiadado que les supera en número y no hace prisioneros.

Cada vez se estrenan menos películas del género bélico, porque eso es este filme:  la historia real, ahora desclasificada, de los 12 primeros soldados estadounidenses enviados a Afganistán a luchar contra Al Qaeda y los talibanes, pocos días después del atentado del 11 de septiembre. 

El equipo seleccionado para responder a ese ataque formaba parte de las Fuerzas espaciales. Estaba  comandado por un joven capitán y una de sus misiones era “diplomática”, ya que consistía en  convencer al general Abdul Rashid Dostum para unir fuerzas con otros clanes en disputa del país  y pelear contra su adversario común: los talibanes y Al Qaeda.

Como no podría ser de otra forma, dado que hablamos de un tema muy sensible para los americanos como fueron los atentados del 11-S  y  la respuesta militar a esos hechos, 12 valientes tiene un contenido tremendamente patriótico y los integrantes de ese grupo de soldados, además de valor, muestran un compañerismo y una gran capacidad de sacrificio por su país porque se enfrentaban a un enemigo que les superaban en número en la proporción alucinante de un 5.000 por uno. Eso sí, esos soldados americanos tenían un por qué para pelear, algo imprescindible para arriesgar una vida hasta el final.

La película se mueve en las coordenadas típicas del género, con la presentación de los personajes y la llegada al complicado terreno donde van a pelear, con la misión de no solo no bajar nunca la guardia, debido a unas tropas afganas que podían estar trufadas de enemigos, sino de aprender a pelear a caballo, al estilo de los soldados medievales o más recientemente, de los vaqueros del western. 

Precisamente las imágenes más poderosas de la película son cuando vemos al joven capitán, que interpreta Chris Hemsworth (en un intento de demostrar que es algo más que su personaje de Thor), encabezar a  ese grupo de jinetes para  enfrentarse a tanques del adversario. Muy bien rodadas, esas instantáneas están correctamente remarcadas por una banda sonora que tiene fuerza. Merece la pena que reparen en el actor iraní Navid Negahban, que actúa de forma magnífica encarnando al líder Dostum. Algo peor conseguido, por excesivo, es el retrato que se hace del líder talibán enemigo del desierto, que  parece sacado de un cómic por su apariencia física y sus histriónicos gestos. 

El ganador del Oscar Ted Tally (El silencio de los corderos) y Peter Craig (Los juegos del hambre: Sinsajo – Partes 1 y 2) han sido los responsables del guión, basado en el libro Soldados a caballo: Una extraordinaria historia de guerra del siglo XXI, del escritor Doug Stanton.

La película posee su cuota española, porque sale interpretando un pequeño papel la actriz Elsa Pataky que repite en la ficción lo que es en la vida real: esposa de Chris Hemsworth. Es la primera ocasión en la que trabajan juntos en la gran pantalla.

Para: Los amantes de los biopics bien interpretados