Con sutileza, y bastante humor, la directora palestina Maha Haj (nacida en Israel),  hila un argumento en el que retrata problemas actuales en Oriente Medio como la difícil convivencia, en ese país, entre judíos y palestinos; los inhumanos controles fronterizos,  la complicada situación de los inmigrantes, el miedo al compromiso de algunos jóvenes e, incluso, los pequeños sueños incumplidos. Lo hace a través de la historia de un matrimonio maduro, residente en Nazaret, que apenas se tolera, así como mediante las vivencias de sus tres hijos. Especialmente tierna resulta la personalidad del yerno, que sueña con ver el mar, y a quien las fronteras se lo impiden a pesar de vivir en una población cercana a la costa. Comedia dramática, de corte realista, que posee un humor fino e inteligente y donde el reparto al completo (totalmente desconocido en nuestro país) está fantástico en sus respectivos cometidos. No obstante se nota mucho el origen palestino de la directora que carga especialmente las tintas en su descripción del comportamiento de los israelíes frente a sus siempre enfrentados vecinos fronterizos. Para: Los que les gusten las comedias dramáticas con contenido         Juana Samanes