Contemplo, compungido, como los presidentes de las patronales CEOE y Cepyme, así como los líderes de UGT y CCOO suspiran por la formación de un nuevo gobierno. Los primeros apuestan por una coalición PSOE-Ciudadanos, los segundos por una coalición de izquierdas, PSOE-Podemos. Y la ministra de Trabajo, con esa capacidad argumental que le caracteriza, asegura que la situación de la economía mundial exige la formación de un Gobierno en España. En efecto, ¿qué sería de la economía mundial si Pedro Sánchez no logra ser investido para permanecer en Moncloa otros cuatro años?

Por mi parte, lamento discrepar de tan excelsos próceres. Todos ellos consideran que la sociedad y la economía españolas, funcionan gracias al Boletín Oficial del Estado (BOE), cuando lo cierto es que funcionan intentando esquivar al BOE, de suyo difícil de esquivar. 

Nos hemos librado de muchas calamidades gracias a que el PSOE tiene atadas las manos por tratarse de un gobierno en funciones

Propongo nuevas elecciones. Por de pronto, se trata de una oportunidad, remota, lo sé, pero, a la postre, oportunidad, para librarnos de Pedro Sánchez. Porque el problema de España no es ni la oposición de izquierdas ni la de derechas, tampoco los separatistas. El problema es el guerracivilismo cristófobo del sanchismo, un guerracivilismo y una cristofobia que inició Zapatero, eludió Rajoy y ahora ha emergido, multiplicada, con Pedro Sánchez ‘el moderado’ de Iván Redondo.

Además, nos hemos librado de muchas calamidades gracias a que el PSOE tiene atadas las manos por tratarse de un gobierno en funciones.

Para España el peligro no es el neocomunismo de Podemos, que ha entrado en declive por sus propias necedades… tal y como siempre le ocurre al comunismo.

Otra ventaja de la no-formación de Gobierno: la Generalitat catalana tendrá que ahorrar: la caja se acaba el 31 de agosto

El peligro no está en el separatismo catalán o vasco: no tiene solución, ciertamente, la única salida es convivir con ello… pero se trata de dos tumores menores. No conviene preocuparse mucho por ello.

Y a lo mejor Ciudadanos se decide a tener una idea y hasta una identidad. A lo mejor el PP se libera de algún complejo y a lo mejor Vox recupera su coherencia con unos principios cristianos. Sí, apuesto por nuevas elecciones: no creo, pero a lo mejor nos libramos de Sánchez.

Además, otra ventaja de la no-formación de gobierno: la Generalitat catalana tendrá que ahorrar, porque la caja del Govern se agota el 31 de agosto. No podrán gastar más. ¿No es formidable?  

Otras elecciones, por favor.