• Por una parte, el marxismo se ha ido de rositas por la historia.
  • De otro, aún es presente. Sobrevive en muchas ideologías y grupos, tipo Podemos.
  • Pero también en partidos considerados  democráticos, como el PSOE o el mismo PP.
  • Sí, todos ellos han sustituido la libertad por los "derechos" y la propiedad privada por la subvención pública.
  • El comunismo mantiene su obsesión anticristiana y su querencia homicida.
  • Claro, como que el comunismo no es más que una gran mentira y el cristianismo juega con la verdad.
  • En cualquier caso, la cuestión del marxismo en el siglo XX continúa siendo la misma: no hay paz sin justicia, no hay justicia sin perdón.
  • Pero el perdón de la víctima sin arrepentimiento del verdugo de poco sirve.
Los errores de Rusia esparcidos por el mundo. Así decían las revelaciones de la Virgen María en Fátima. Al final, gracias a Juan Pablo II cayó el leninismo, pero su sustrato ideológico, el marxismo se ha ido de rositas por la historia. Como si no hubiera roto un plato. Por ejemplo, como si no hubiera masacrado a los cristianos, a los que consideraba su peor enemigo. No, no a Estados Unidos, contra quien sólo le enfrentaba la primacía por el poder mundial y la oposición entre capitalismo financista y capitalismo de Estado. Pero, ojo, los dos son capitalismo. Sí, esos dos factores son mucho pero sólo explican la Guerra Fría, no la tiranía que el estalinismo y el maoísmo sembraron en todo el mundo. Sí, en todo el mundo. José Ángel Gutiérrez ha contado en Hispanidad la historia de Cyril Vasil, una historia para recordar. El comunismo masacró a los cristianos y los cristianos debemos perdonar. Cierto pero el perdón de la víctima sin arrepentimiento del verdugo de poco sirve, al menos al verdugo. Y luego está la proyección social del asunto, la que resumía con aquella genialidad eslava, el mencionado vencedor del comunismo Karol Wojtyla: "No hay paz sin justicia, no hay justicia sino perdón". Y no hay perdón sin arrepentimiento… por la razón aducida. Me temo que el comunismo está vivo, apoyado incluso por los neocomunistas del tipo Podemos… y me temo algo peor: no sólo está vivo sino que, como siempre, le acompañan muchos muertos, los que él provoca. Pero también en partidos considerados  democráticos, como el PSOE o el mismo PP. Sí, ambos son creadores de miseria que justifican con la necesidad de cuadrar las cuentas públicas. Y sí, ambos han sustituido la petición de libertades por la petición de derechos, es decir, la propiedad privada por la subvención pública. Es lógico: un proletario es mucho más esclavizable que un propietario. Y el comunismo pretende eso: esclavizar. Y sobre todo, mantiene su obsesión anticristiana y su querencia homicida. Lógico: el comunismo no es más que una gran  mentira y el cristianismo juega con la verdad. O sea, Podemos es marxista. Dice que su fin son los pobres cuando lo que hacen es utilizar a los impecunes para medrar a sus dirigentes. Iglesias, igualito que Stalin, sólo que más cobarde. Afortunadamente. Eulogio López eulogio@hispanidad.com