El papel de la mujer como esposa y como madre resulta mucho más relevante para la sociedad, y para la economía, que su papel como trabajadora. Es cierto que se puede decir lo mismo del varón pero no en el mismo grado: la maternidad marca más que la paternidad durante los primeros años de la vida del ser humano, incluido el embarazo.
Sería mucho mejor que la mujer volviera al hogar y que el hogar volviera a ser una unidad productiva

En cualquier caso, ser madre dificulta más la carrera laboral que ser padre, no porque lo imponga el machismo sino porque lo impone la naturaleza.

Chesterton lo explicaba así: "200.000 mujeres repiten: 'no queremos que nadie nos dicte'. A renglón seguido, van y se hacen dactilógrafas". Es decir, pasan de reinas de su hogar a siervas de su jefe. Y les aseguro que no les va a consolar nada el hecho de que se trate de una jefa.

Ocho de marzo, día Internacional de la mujer trabajadora. ¿Para cuando el día Internacional de la Mujer Madre? Llevamos un siglo regidos por el falso principio de que la mujer que no trabaja fuera del hogar no trabaja en modo alguno y que, además, no trabaja porque no vale para ello. Vamos, que hemos despreciado el papel de la madre como transmisora de la vida, educadora y especialista… en todo. Nos hemos olvidado de que el hogar no es un lugar aburrido, alejado de la gran aventura del mundo. Es el mundo, en particular el mundo laboral, el que es un lugar aburrido, marcado por normas rígidas que nos han convertido en autómatas. Y a eso le llamamos Estado de Derecho. El único espacio libre que queda es, precisamente, la casa de cada cual, donde manda la mujer.

O como decía un amigo periodista, muy progresista él, de puertas afuera, "¿a éstas quién las ha engañado?". Han trocado su libertad en el hogar, donde eran madres y señoras, por la esclavitud del mercado laboral". ¡Enhorabuena progresistas

Además, otro tópico es que el cambio no lo ha producido ni el feminismo ni la modernidad sino la economía. ¿Es que antes la mujer ama de casa no trabajaba? Claro que sí, cuando el hogar era una unidad de producción. Colaboraba con el hombre con idéntica capacidad e idéntica responsabilidad, y no se la sometía a los trabajos más duros, como hace el 'liberador' esquema laboral actual.

Por cierto, con la incorporación de la mujer al mundo laboral cayó la maternidad y se envejeció la población, el principal problema económico y social de la civilización occidental actual. Y todos sabemos lo que eso significa: crisis económica permanente.

¿Para cuando el Día Internacional de la Mujer Madre? ¿Para cuándo el salario maternal?

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com