Primero fue la bomba demográfica. Ahora nos han inoculado una nueva desazón global con el cambio climático. Por cierto, como ahora hace mucho frío en el hemisferio norte no nos hablan de calentamiento global, pues no colaría, pero pronto llegará el verano y volverán a la carga.

En cualquier caso, vamos mal y vamos a peor

Es todo un gran embuste para tenernos en perpetuo estado de amargura e histeria (a lo mejor no por ese orden). Lo cierto es que este planeta da para alimentar a docenas de humanidades como la actual, gracias a los dones de Dios (por ejemplo, el planeta y el universo entero) y a la inteligencia humana (que también es don de Dios).

Se trata de mantener a la humanidad en estado de angustia y de histeria

La respuesta está en Holanda y su agricultura vertical... y en muchas otras innovaciones.