• En el mundo hay cosas mucho peores que la corrupción.
  • Por ejemplo, el aborto.
  • Nos estafan los corruptos.
  • Ahora también nos estafan los paladines anti-corrupción.
Que sí, que hay que luchar contra la corrupción. Pero considerando, al menos, dos cosas: 1.- Que la corrupción no es lo peor del mundo. Por ejemplo, el homicidio, en especial el aborto, es muchísimo más grave. Y es legal. 2.- Que nos están engañando con la corrupción. A casi ningún político le importa acabar con ella: es sólo munición para la degradada vida política española. Y, en cualquier caso, un cúmulo de exageraciones y disparates. Muchos medios informativos han convertido la denuncia de casos -tanto los verdaderos como los falsos- de corrupción, en su única posibilidad de supervivencia y de crecimiento político. Sé que suena a herejía, pero para mí que no hay que hacer mucho caso de las denuncias sobre corrupción. Nos están estafando. Nos estafan los corruptos. Ahora también nos estafan los paladines anti-corrupción (en la imagen, Pablo Iglesias). Eulogio López eulogio@hispanidad.com