Puigdemont está semilibre tras la decisión de la Justicia alemana, que nos dice a los españoles sobre qué podemos juzgarle. Algo parecido ha ocurrido con la justicia belga, otro miembro de la Unión Europea (UE) y entonces nos encontramos con que los jueces alemanes pueden cargarse la UE que pretendía convertirse en los Estados Unidos de Europa. Esta sentencia hace más daño al europeísmo que el Brexit. Me explico. Para forjar una patria, una nación, una sociedad, se necesitan unos principios comunes. Los principios son una cosmovisión compartida, la cosmovisión es lo que hoy llamamos cultura, la cultura es culto y el culto es religión.

Pero también nos hemos quedado sin derecho común, ergo no es posible la Unión Europea (UE)

Europa podía ser una única patria porque tenía una filosofía común: el cristianismo. Pero vivimos en una Europa más que postcristiana, directamente anticristiana. En resumen, se necesitan unos principios comunes (cristianos) para forjar la patria común: Europa.

Por tanto, esa oportunidad se ha perdido hasta que Europa no se recristianice.

Ahora bien, si no podemos aspirar a una sociedad común siempre nos queda la posibilidad de un Estado común.   

La que has liado, Puchi

Para hacer un Estado (la UE) basta un derecho común. Se lo han cargado los jueces alemanes y belgas.

Ni principios comunes ni derechos comunes. Pues así no hay manera de hacer Europa.