Bueno, serán ‘casables’ en el caso de que todos agüen su programa. Sobre todo si lo adultera Vox, lo que lleva sucediendo desde Andalucía y ahora podría acaecer en Madrid.

En Hispanidad ya hemos advertido que si no se aplica de inmediato el cheque escolar y si no se deja claro que los padres deben aprobar los contenidos de promoción de la homosexualidad que reciben sus hijos en los colegios (la mayoría querrá que no reciban ninguna) en Andalucía y en Madrid, la sospecha de que el PP le ha tomado el pelo a Vox, y de que éste se lo ha dejado tocar, no será otra cosa que una obviedad.

La izquierda y la derecha ya no se diferencian por la economía, sino por los principios no negociables: vida, familia, libertad de enseñanza y bien común

Pero volvamos al PP y al intento de Pablo Casado de conseguir una gran coalición preelectoral, entre PP, Cs y Vox, en todo el país y si pudiera ser como lista única. Don Pablo está convencido de que eso es posible desde el momento en que comenzaron las fracturas en Ciudadanos.

Ahora bien, Casado me recuerda a esos nuevos CEOs que comienzan su mandato empresarial aprobando una serie de cambios lentamente, “con prudencia”… y no los acaban nunca. Cuando uno llega la Presidencia, o a la Consejería Delegada, debe hacer todos los cambios en un fin de semana. Así el llanto dura menos y las decisiones del recién llegado no se discuten… porque acaba de llegar.

Hoy, todo es socialdemocracia, tanto en la izquierda como en la derecha. Socialdemocracia que, por cierto, nos llevará a la ruina

Casado quiere hacer cambios con lentitud, con desesperante lentitud, cuando eso es lo peor que puede hacer.

Tras su desastre electoral, Casado pretende casar a Ciudadanos con Vox y a este con el PP, bajo el curioso argumento de que los tres son de derechas porque a los tres les gusta la unidad de España y alguna cosilla más. Como los tres son de derechas…

Como si eso bastara. Para entendernos, lo que distingue hoy a los partidos, de izquierda y de derecha, no es la economía. Ya no estamos en la izquierda y derecha clásicas, favorables al socialismo o al liberalismo. Hoy, todo es socialdemocracia, tanto en la izquierda como en la derecha. Socialdemocracia que, por cierto, nos llevará a la ruina.

En materia de principios no negociables, PSOE y Cs se parecen como dos gotas de agua… por ejemplo

Lo que distingue hoy a los partidos son los principios no negociables (vida, familia natural, libertad de enseñanza y bien común) al que yo siempre añadiré la defensa de la libertad religiosa.

Y, con todo respeto, resulta que en todos esos principios apenas hay diferencias entre la izquierda y la derecha. Ejemplo: tan progre es el PSOE como Ciudadanos.

Y en la misma línea, Vox es el único partido que defiende esos principios no negociables. En teoría, porque lo que es en la práctica…

Así que el tridente de las tres derechas no es posible porque en muy poco se distinguen en materia de principios no negociables. Vox sí, pero Vox está patinando en la lealtad a esos ideales y muchos empiezan a darse cuenta.

Y la unidad de España no está mal, desde el luego, pero… ¿unidad de España en torno a qué?