El CIS ha lanzado su encuesta previa a las elecciones en Euskadi y Galicia. Pura casualidad por supuesto pero es lo que Sánchez espera de ambas convocatorias.

En Galicia, acepta que Feijóo arrase. Así podrá seguir mortificando a Pablo Casado como posible alternativa a La Moncloa.

En Euskadi gana el PNV pero, junto a PSOE, podía gobernar. Es más no necesitarían a Podemos, que pretendía un tripartito PSOE-Podemos-Bildu. Por cierto, los proetarras se sitúan en segundo lugar en Euskadi.

Sánchez prefiere que el lehendakari sea nacionalista. Y además, del PNV, una nacionalismo de derechas pero independentista y con un fuerte resentimiento hacia todo lo español.

En cualquier caso, Podemos tampoco se derrumba pero eso sí, no marca la pauta. Justo lo que pretende Pedro Sánchez.