• «El Santo Padre añadió: "Europa será como un sótano, viejas reliquias, sombras, telarañas. (…) Ustedes, la Iglesia del tercer milenio, deben contener la invasión. No con los ejércitos, los ejércitos no serán suficientes, sino con su fe, viviéndola con integridad».
  • Lo reveló Mauro Longhi, quien a menudo acompañaba al Papa en viajes de excursión cuando todavía era estudiante.
  • Y añadió que San Juan Pablo era un místico que «dialogaba» con Nuestra Señora y tenía visiones proféticas.
Mons. Mauro Longhi, quien a menudo acompañaba al Papa en viajes de excursión cuando todavía era estudiante, dijo que San Juan Pablo II era un místico que «dialogaba» con Nuestra Señora y tenía visiones proféticas, recoge Infocatólica de Catholic Herald. Mons. Mauro Longhi contó que el expontífice previó una «herida mortal» a la Iglesia en el tercer milenio El Papa Juan Pablo II tuvo una visión profética de una «invasión islamista» de Europa, afirmó un antiguo confidente. Hizo las declaraciones durante una conferencia en la Ermita de los Santos Pedro y Pablo en Bienno, en el norte de Italia, que se ha publicado en YouTube. Durante una reunión en 1992, dice monseñor Longhi, Juan Pablo II habló de una visión inquietante que había tenido sobre el futuro de Europa. «El Papa me dijo: "Díselo a aquellos a quienes vas a encontrar en la Iglesia del tercer milenio. Veo a la Iglesia afligida por una herida mortal. Más profunda, más dolorosa que las de este milenio", refiriéndose al comunismo y al totalitarismo Nazi. "Se llama islamismo. Ellos invadirán Europa. He visto a las hordas venir de Occidente a Oriente, y luego me contaron cada país uno por uno: de Marruecos a Libia a Egipto, y así sucesivamente hasta el Este"». «El Santo Padre añadió: "Van a invadir Europa, Europa será como un sótano, viejas reliquias, sombras, telarañas. Reliquias familiares Ustedes, la Iglesia del tercer milenio, deben contener la invasión. No con los ejércitos, los ejércitos no serán suficientes, sino con su fe, viviéndola con integridad». Mons. Longhi acompañó al Papa Juan Pablo II en excursiones de senderismo y esquí desde 1985 hasta que fue ordenado 10 años después. Dijo que el Papa dejaba Roma en un modesto automóvil para no llamar la atención y se quedaba en una casa del Opus Dei en las montañas de Abruzzo. Por la noche, el Papa a menudo se arrodillaba ante el Tabernáculo en la capilla del edificio, conversando «a veces incluso animadamente» con el Señor. Mons. Longhi también dijo que el cardenal Andrzej Deskur, uno de los amigos más cercanos de Juan Pablo II, le dijo que el pontífice tenía el «don de las visiones». «Él le hablaba a Dios Encarnado, Jesús; él veía su rostro y también veía el rostro de su madre», dijo el cardenal. El Papa Juan Pablo II es conocido por promover el diálogo interreligioso entre católicos y musulmanes, convirtiéndose en el primer Papa en poner pie en una mezquita en 2001. Sin embargo, en su encíclica Ecclesia in Europa de 2003, el ex pontífice escribió que el diálogo con el Islam «debe llevarse a cabo con prudencia, con ideas claras sobre posibilidades y límites, y con confianza en el plan de salvación de Dios para todos sus hijos». «También es necesario tener en cuenta la brecha notable entre la cultura europea, con sus profundas raíces cristianas, y el pensamiento musulmán», agregó. José Ángel Gutiérrez joseangel@hispanidad.com