Una vez que empiezas… no hay marcha atrás.

Dos leyes de la dimitida Cristina Cifuentes (marzo y julio de 2016) ha expandido la ideología de género y el homosexualismo en distintos ámbitos sociales, también en el educativo.

Cambiar de hetero a homo sí, pero, ¿lo contrario? Eso es apostasía

Por cierto, tanto esta normativa como todo lo referente a la llamada cultura (¿cultura?) de género no admite la reversión. Sí reparen en que toda esta normativa (la nacional que pretende Podemos y las autonómicas y hasta locales) tienen algo en común: advierten contra quien pretende educar en la heterosexualidad o convencer a un gay de que deje de serlo.

La ideología de género, también las leyes heredadas de la dimitida Cristina Cifuentes, mantiene este principio

Puedes pedir cambiar de sexo pero, a partir de ahí, no hay reversión. No se puede apostatar ni de la homosexualidad ni de la transexualidad. Porque está bien hacerte homo pero no hetero. Eso sería demasiada tolerancia.