La corresponsal de RTVE en Washington sospecha que el patógeno esparcidor de virus por todo Estados Unidos es el propio Donald Trump, un tipo irresponsable e insolidario, ligeramente deleznable.

Es más, Cristina Olea asegura que el lugar desde el que se dirige la nación más poderosa del mundo se ha convertido en un centro de infección de Covid y resume una serie de altos cargos afectados por la inconsciencia de Donald.

Y sobre todo, Olea, asesora electoral en la sombra de Joe Biden, lo plantea como un caso único en el mundo.

Al parecer, olvida que en España estuvieron afectados por el coronavirus, la mujer del presidente del Gobierno, la vicepresidenta primera -hospitalizada y la ministra de Igualdad, pareja del vicepresidente segundo, quien, hablando de irresponsabilidad, no guardó cuarentena porque le pilló peleando por su cuota de poder, cosa seria, y la titular de la cosa autonómica, ministra Carolina Darias.   

Si la Casa Blanca era un foco de infección, ¿qué es Moncloa?

Por otra parte, Trump afrontó con valentía su enfermedad, Sánchez nos encerró a todos los españoles… y aún así hemos tenido muchos más muertos por coronavirus que Estados Unidos. Esa es la diferencia.

Y los malos hábitos no se olvidan. Insisten los medios españoles en hablar de muertos por coronavirus en cifras absolutas. Así, evitan reconocer que, por ejemplo, los fallecidos españoles (por habitante, claro) superan a los fallecidos en EEUU. O sea, que el desastre no es Trump, el desastre, para nuestra desgracia, es Sánchez.