Desaparece en papel, no en digital. Ahora bien, en sí mismo, que el libro de familia desaparezca no es que me importe mucho. Lo que me molesta es el porqué desaparece. El libro de familia no molestaba a nadie pero, claro, pertenecía a una época donde la gente se comprometía con el cónyuge y con los hijos. Porque eso era el libro: la plasmación de tu situación familiar y vital: cónyuge e hijos. El Libro de Familia rinde pleitesía al matrimonio.

Ahora, con parejas de quita y pon, el libro de familia había que cambiarlo cada año. Además, los hijos brillan por su ausencia.

Conclusión: no me molesta que desaparezca me molesta el porqué desaparece.