• Que lo propongan otros. Los jubilados son sus votantes.
  • Pero los otros no están por la labor: que lo haga el Gobierno.
Los cuatro líderes políticos (Mariano Rajoy, Pedro Sánchez, Pablo Iglesias y Albert Rivera) saben perfectamente que el sistema público de pensiones amenaza quiebra inmediata. La sociedad ha envejecido y la única manera de aliviar a corto plazo el peso de las pensiones es retrasar la jubilación y, a corto plazo, promocionar la natalidad. Ahora bien, ni se aborda el largo plazo ni las soluciones a corto. El PP se niega a retrasar de golpe la edad de jubilación porque resulta que atentaría directamente contra sus votantes. Y los otros tres, con toda razón, aseguran que el Gobierno no es quien debe proponer esas decisiones. Y ellos negarse a aceptarlas, claro está. Y entre tanta demagogia y tanta cobardía, el sistema se va a la quiebra. Eulogio López eulogio@hispanidad.com