• Mientras, los terroristas ya "estiran sus manos hacia las armas químicas".
  • Y en Siria se decide el resultado de la lucha contra el Daesh, pero Washington considera sus aliados son Ankara y Riada, no Moscú.
  • El potencial conflictivo del mundo está creciendo, advierte Putin.
Cumbre de la OTAN en Varsovia. Barack Obama, el presidente más desastroso de la historia reciente de uno de los países más desastrosos del planeta, EEUU, vuelve a mirar desafiante -porque chuleta es un rato- a Moscú. El enemigo a batir sigue siendo Rusia y como hace 50 años continuamos "volando hacia Moscú". Pero la III Guerra Mundial no va por ahí. La III Guerra Mundial que recuerda una y otra vez el Papa Francisco, en la que ya estamos, es la guerra terrorista, esos cobardes que se protegen detrás de mujeres y niños. Lo lógico es que OTAN se uniera  Rusia para luchar contra los enemigos de Occidente… que no se acaban en el mundo islámico, pero dejemos eso ahora. Vean ustedes el contraste entre el planteamiento de Obama y el del presidente ruso, en su discurso ante el Cuerpo Diplomático. Su análisis comienza con dos realidades meridianas: la situación en el mundo se hace cada vez menos predecible y el potencial conflictivo del mundo está creciendo. Y una advertencia final: los terroristas están alargando su mano hacia las armas químicas. Y Putin debe saberlo. Eulogio López eulogio@hispanidad.com