• En Europa imperan los bobos, los burgueses y bohemios, que claman contra Trump mientras alaban a China, la mayor tiranía del mundo.
  • Y, naturalmente, abominan del Cristianismo, fundador de Occidente.
  • A los polacos, por ejemplo, les crucifican.
  • Merkel firma acuerdo de libre comercio con China.
  • Son los 20 países más poderosos del mundo pero no cambiarán el mundo porque se están pegando entre ellos.
  • Se pegan desde la misma ideología, llamada globalización, que sólo significa esto: los principios no importan, lo único que importa es el dinero.
Donald Trump ha ofrecido en Varsovia un discurso digno de un estadista mundial. Ha recordado los valores occidentales, que no son otros que los valores cristianos. Esto es, una ideología que sólo tiene un mandamiento: la persona es sagrada porque es hija de Dios. Con esa idea Occidente siempre vencerá a Oriente, sin Cristo Europa está condenada a fracasar. Y Europa, al suicidio. El actual golpe de Estado de los llamados liberales norteamericanos -es decir, la masonería norteamericana, cabeza, por el momento, del Nuevo Orden Mundial (NOM) sólo se entiende en un país que, como Estados Unidos, vuele a suicidarse. Los demócratas, el New York Times o la CNN están poniendo en solfa sus mismos principios democráticos. Se están suicidando. Así que Trump habla de la civilización occidental y los medios occidentales se le echan encima. Es más, se echan encima del pueblo polaco porque sólo tiene un 7% de extranjeros ¿Y qué? La verdad que se le echan encima porque Polonia es todavía cristiana, al menos mucho más fiel a su fe que España. Quiere Trump hacer frente a Corea y entonces es cuando se ha encontrado con la estúpida venganza de Vladimir Putin (aquí el ruso ha cometido un grave error) que bloquea en Naciones Unidas, una reacción frente a Corea. Sin embargo, para la prensa española, que aun añora al chulo de Obama, no es más que un macho alfa que emite testosterona. Observen que el chino Xi Jinping, el mayor tirano del Globo, no merece sino palabras de elogio por su defensa del libre comercio. Y, en cualquier caso, que Angela Merkel se enfrente a Trump mientras sonreía al tirano Xi Jinping es como para temer que, en efecto, Oriente resurge -y nos aplastará-, Estados Unidos se suicida -y caerá- mientras Europa se muestra más necia que nunca. Son los 20 países más poderosos del mundo pero no cambiarán el mundo porque se están pegando entre ellos. Se pegan desde la misma ideología, llamada globalización, que sólo significa esto: los principios no importan, lo único que importa es el dinero. En Europa imperan los bobos, los burgueses y bohemios, que claman contra Trump mientras alaban a China, la mayor tiranía del mundo. En Europa imperan los 'Bobos', los burgueses y bohemios, que claman contra Trump mientras alaban a China la mayor tiranía del mundo. Esto es el G-20. Eulogio López      eulogio@hispanidad.com