Abascal está a punto de aceptar que el PP y Cs gobiernen Madrid... para no darle el poder a Gabilondo. Y en Murcia -otra sesión de negociaciones en la mañana del miércoles- ocurre tres cuartas partes de lo mismo. Al parecer, Abascal no ha aprendido lo que le ocurrió en Andalucía, donde Ciudadanos y PP le tomaron el pelo además de despreciar a la ultraderecha fascista.

Pero Vox no ha sido votado para echar a la izquierda del poder sino para echar a la progresía, sea de izquierdas o de derechas, y para devolver a la vida pública un serie de principios cristianos que habían sido expulsados de la misma.

Ejemplo de Madrid. Rocío Monasterio pidió tres cosas, aunque la más importante era la derogación de las dos leyes de identidad de género de doña Cristina Cifuentes. Esas que están haciendo que los niños de cinco años se cuestionen si son niños o niñas. Además, Monasterio volvió a insistir en la defensa del derecho a la vida "desde la concepción hasta la muerte natural". Algo que, envidentemente, no dice ahora ni un sólo político del Partido Popular y, en pocas palabras, de ningún partido con representación parlamentaria. Lo que viene a demostrar una vez más que en Vox hay mucho patriota (eso también lo hay en Ciudadanos) pero pocos apologetas de los principios no negociables de un católico en la vida pública: vida, familia, libertad de enseñanza y bien común. 

Vox no ha irrumpido en la senda política para que no gobierne la izquierda sino para reintroducir los principios cristianos en la vida pública

 

Vox no ha venido para apuntalar al PP ni para echar al PSOE, sino para recuperar los principios cristianos en la vida pública española.

Lo de Vox es una crisis de coherencia. Quienes le aconsejan que no deje gobernar a la izquierda en Madrid o en Murcia son los mismos que impelían a Vox a romper con tres décadas de socialismo andaluz. ¿Ha cambiado algo en Andalucía con el PP y Cs en orden a los principios cristianos? No me hagan reír.

Bueno sí, algo ha cambiado: entre Andalucía y el ciclo electoral que concluyó el 26 de mayo Vox ha perdido la mitad de sus votos. Por no ser coherente.