Mañana del martes 13. El Gobierno anuncia que llevará a cabo su amenaza: ya no se necesitarán tres quintos de la cámara para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) sino la mitad más uno: 176 situados, algo que ya obtuvo Sánchez con el frente popular formado por socialistas, comunistas y separatistas, tanto en su moción de censura como en su investidura.

Así que ya lo saben: Si no hay acuerdo político… politizo aún más la justicia. Ante la falta de consenso, el Gobierno opta por el ‘monosenso’.

Ante la falta de consenso, el Gobierno opta por el ‘monosenso’

Ni por un momento ha pensado el Gobierno en democratizar más el máximo órgano de poder de los jueces. Por ejemplo, haciendo que sean sus señorías magistrados quienes elijan a quienes les rigen. O mejor, conminar una elección de los órganos de control de los jueces por los propios ciudadanos.

Sin embargo, para eso están dos iletrados, como Adriana Lastra -la culpa es del PP- y Pablo Echenique -lo hacemos para proteger a la justicia- quienes han ejecutado la orden de Pedro Sánchez. Para el PP es un golpe de Estado contra la separación de poderes. Parece evidente que el PSOE quiere controlar la justicia... aún más.