Aznar pretende un gobierno -que no simple pacto- de coalición PP-Cs-Vox. Eso sí, sin que nadie le falte al respeto. Por ejemplo, sin que le llamen 'derechita cobarde'… que eso es precisamente lo que fue, aunque un poco menos que Rajoy.

Aznar prefiere la España roja a la España rota. Es lógico, sabiendo que la alternativa es Pedro Sánchez. Ahora bien, yo no lo prefiero: con la derecha pagana, España, un país de raíces cristianas, no va a ningún sitio.

En cualquier caso, Sánchez sabe que necesita de lo de la moción de censura para mantenerse en el poder. Es decir: es socialista, comunista y separatista. No obstante, si pudiera prescindir del separatismo y quedare con PSOE-Podemos-Cs… por supuesto que lo haría.

Señor Aznar, no confíe usted tanto en Albert Rivera. Y, sobre todo, no anteponga las identidades a las ideas.