• Es la religión de moda y la historia misma de la estupidez.
  • Ojo, la defienden muchos poderosos. Ejemplo: Ada Colau.
  • Llegaremos al fruticolismo: no comáis sino frutas caídas del árbol.
  • Considerar a las bestias por encima del hombre se ha convertido en una religión de nuestro tiempo.
  • Suspiramos por los toros de lidia pero no nos importa asesinar bebés, unos enanos bastante más indefensos que los Miura.
  • ¡Que viva el chuletón y los toros!
Una niña de dos años está hospitalizada en Génova por llevar dieta vegana. Ya sabes, no sólo no comer carne, pescado y huevos sino, siempre más allá, ningún producto que suponga la explotación de los bichos. Por ejemplo, la leche. Supongo que no les pasará nada porque el animalismo, o consideración de las bestias, no ya en paridad de estima, sino por encima del hombre, es una de las religiones de nuestro tiempo. Insisto en que llegaremos a lo de los frutícolas, de Notting Hill, aquellos que tampoco comen frutas o verduras arrancadas de los árboles o de las matas, sólo las ya muertas, las caídas por su propio peso, es decir, ya cadáveres y quién sabe si suicidas. Y esto de la dieta vegana, ¿es una locura que esperamos tenga un fin rápido? No, es una categoría de necedad aceptada por la autoridad competente y promovida por los poderosos No exagero: recuerden que doña Ada Colau -bendita sea- ha convertido Barcelona en capital arco iris y amiga de la cultura vegana. Ahora la cultura vegana está ingresada en un hospital de Génova en forma de una cría inocente de dos años, porque hay vitaminas que sólo tienen las sustancias animales y claro entre las niñas y los animales, o entre su hija y sus prejuicios, ya se sabe lo que eligen algunos. Pero, con todo, es evidente que los mejillones también tienen sentimientos y no pueden ser asesinados. Como diría Rajoy: "Somos sentimientos y tenemos seres humanos". Al principio fue el animalismo. Y claro, considerar a las bestias por encima del hombre se ha convertido en una religión de nuestro tiempo. Y así, suspiramos por los toros de lidia pero no nos importa asesinar bebés, unos enanos bastante más indefensos que los Miura. ¡Oiga, que viva el chuletón! Eulogio López eulogio@hispanidad.com