Según informa Tinsa, el mercado residencial mostró en noviembre, en línea con otros sectores económicos, una tendencia alcista en los precios. El valor medio de la vivienda nueva y usada se incrementó un 1,2 % en tasa mensual, según la estadística Tinsa IMIE General y Grandes Mercados publicada hoy, lo que deja la variación interanual del índice general en un 9,5 %. “La evolución del sector inmobiliario se enmarca en un entorno de recuperación económica en el que la demanda se reactiva más rápido que la oferta y tensiona los precios al alza”, afirma Cristina Arias, directora del Servicio de Estudios de Tinsa.

En el mercado residencial, la estadística refleja que todos los agregados geográficos registran elevadas variaciones, tanto en términos interanuales como acumulados desde marzo de 2020 y algo más moderados durante 2021, constatando una tendencia alcista por encima de los ritmos de 2019.

La demanda asociada a las nuevas necesidades de vivienda descubiertas por los usuarios durante el confinamiento se está viendo acompañada por un interés inversor. “La demanda refleja una actividad por encima de la oferta en un entorno de tipos bajos, que unido a la incertidumbre sobre la inflación y la menor rentabilidad de otros productos financieros —depósitos y deuda pública—, hacen del producto inmobiliario una inversión alternativa atractiva”, apunta Cristina Arias.

Descartamos que se esté produciendo un sobreconsumo de crédito y producto residencial

Pese a las tensiones inflacionistas, el análisis de indicadores descarta señales de alerta desde el punto de vista de la concesión de crédito. ”La relación entre hipotecas y compraventas se mantiene en una proporción equilibrada que evidencia la capacidad de ahorro y los recursos propios de la demanda actual, en un marco en el que los criterios de concesión de las entidades financieras no han variado. Por todo ello, descartamos que se esté produciendo un sobreconsumo de crédito y producto residencial”, explica la directora del Servicio de Estudios de Tinsa.

En el último mes (noviembre vs octubre), la estadística refleja una tendencia alcista moderada del 1,7% en el índice general, con crecimientos máximos en el entorno del 2 %. Los municipios más pequeños de interior y de la costa atlántica, agrupados en ‘Resto de municipios’, destacaron por su estabilidad (+0,4 % mensual), así como los territorios insulares, donde el precio medio se incrementó un 1,1 % entre octubre y noviembre.

El valor medio de la vivienda nueva y usada se ha incrementado un 28,2 % desde el mínimo valor registrado por el índice general tras la crisis financiera (febrero de 2015). La subida del 36,5 % experimentada por las capitales y grandes ciudades y del 35,6 % en las islas contrasta con el incremento de apenas un 11 % experimentado por las localizaciones agrupadas en ‘Resto de municipios’ y el 22 % de las áreas metropolitanas.

Tras el alza de los precios registrada en los últimos meses, el valor medio en España está un 28,2 % por debajo del momento más tensionado del ciclo anterior, en 2007. En la costa mediterránea, la caída acumulada desde sus máximos se sitúa en el 35,8 %, manteniéndose como el grupo con mayor diferencia respecto a 2007, en contraste con el escaso 11,2 % que separa el precio medio actual en las islas de sus máximos.