Comienza la vuelta al cole dos semanas antes de que se convoquen elecciones, en el caso de que Pedro Sánchez no sea investido presidente. CONCAPA (Confederación Católica Nacional de Padres de Familia y padres de Alumnos) ha aprovechado para pedir la devolución de las competencias educativas al Gobierno central. Además, recuerda que el número de textos editados se ha duplicado en poco más de diez años, lo que conlleva un "coste económico desorbitado" que afecta tanto a las Administraciones como a las familias. En definitiva, tener 17 sistemas educativos es, entre otros, de lo más costoso. 

No obstante, al Gobierno Sánchez no le gusta la educación concertada, mucho menos la católica, por lo que las peticiones de la Confederación no parece que vayan a tener respuesta; no sería la primera vez. Y es que Sánchez busca estatizar la educación. De hecho, entre las nuevas medidas que presentó la semana pasada, quieren empezar por las guarderías (punto 94). Recuerden que en Cataluña los centros educativos que lo deseen podrán pasar a ser públicos, aunque de necesitar plazas, también podría 'expropiar' la educación sin necesidad de pedir permiso.

HazteOir ha abierto una campaña para implantar el PIN parental, para que sin el consentimiento de los padres no se pueda adoctrinar a los niños en ideología de género

La educación diferenciada por sexos tampoco gusta a la izquierda. Así, para garantizar la "inclusión", se "eliminará la segregación escolar". Ojo, no solo por razones de sexo, sino también por las "necesidades educativas especiales" de los alumnos. Y siguiendo con la misma lógica de igualdad, en el punto 83 de las medidas socialistas se lee lo siguiente: "Se potenciará la educación afectivo-sexual dentro del sistema educativo, conforme a un enfoque de derechos, de igualdad y libertad". Pues bien, en Navarra la izquierda -con el apoyo socialista- ya pervertía a los niños -de 0 a 18 años- en la sexualidad con lecciones sobre temas como "masturbación masculina y femenina, diferencias y semejanzas, aspectos positivos y aspectos que generan preocupación".

Por su parte, Vox ha sido el único partido que ha luchado por la aplicación del cheque escolar para garantizar el derecho de los padres a elegir la educación de sus hijos. No obstante, tan solo lo ha hecho en Madrid Rocío Monasterio, ya que ni en Murcia ni en Andalucía se recogía la propuesta en los acuerdos de las tres derechas. De hecho, preguntado el presidente popular andaluz, Juan Manuel Moreno Bonilla, por el cheque, afirma que es "una medida que estamos estudiando". Añade que "ha funcionado en otras Comunidades Autónomas y en otros países" -lo cierto es que nadie lo ha implantado en España-, pero "hay otros problemas" que requieren su atención, antes que garantizar el cumplimiento del artículo 27 de la Constitución.

Y mientras la política no termina de aclararse, HazteOir ha abierto una campaña para implantar el PIN parental, para que sin el consentimiento de los padres no se pueda adoctrinar a los niños en ideología de género en las aulas.