Primero, como siempre, recordemos los resultados de las últimas elecciones generales del 10 de noviembre de 2019: el PSOE obtuvo el 28% de los votos y 120 escaños, el PP sacó el 20,82% de los votos y 89 escaños, Vox se hizo con el 15,09% de los votos y 52 escaños, Podemos obtuvo el 12,84% de los votos y 35 escaños y Ciudadanos se hizo con el 6,79% de los sufragios y 10 escaños.

Según una encuesta de NC Report para La Razón, el PP sacaría el 26,9% de los votos y 109-11 escaños. El PSOE obtendría el 26,1% y 106-108 escaños. Vox se haría con el 17,1% y 59-61 escaños. Unidas Podemos obtendría el 9,9% y 23-25 escaños. Ciudadanos sacaría solo el 2,8% y 1-2 escaños. Más País se haría con el 3,7% y entre 5-7 escaños.

Casado sobre Vox: "Se nos echó un pulso para sustituirnos, se nos decía que éramos un partido «cobarde» y que iban a liderar la oposición e íbamos a acabar como la UCD. [...] A nosotros no nos viene a echar un pulso un partido que no gobierna nada"

Además, según una encuesta de Sigma 2 para El Mundo, el PP obtendría el 30,2% y 126 escaños. El PSOE sacaría el 25,7% y 95 escaños. Vox obtendría el 15,2% y 48 escaños. Unidas Podemos se haría con el 13% y 33 escaños. Y Ciudadanos, con el 3,6% y 2 escaños.

Cabe preguntarse si, en caso de necesitar el PP a Vox para gobernar, el partido de Pablo Casado le pediría ayuda, pues hasta el momento se ha mostrado muy arrogante con el partido de Santiago Abascal. Y si no, miren la respuesta de Casado en una entrevista este domingo en El Mundo, sobre Vox: "Se nos echó un pulso para sustituirnos, se nos decía que éramos un partido «cobarde» y que iban a liderar la oposición e íbamos a acabar como la UCD. Conociendo a Isa (se ríe, refiriéndose a Isabel Díaz Ayuso), seguro que ella habría contestado incluso con más vehemencia que yo, como lo hizo, por ejemplo, con su socio de gobierno, Cs. Al PP se le tiene que respetar. A nosotros no nos viene a echar un pulso un partido que no gobierna nada. Y ya está. ¿Eso quiere decir que yo ahora vaya a perder un solo minuto sobre Vox? No. ¿Yo he vuelto a hablar de Vox desde entonces? Sólo cuando me preguntan ustedes. Yo he seguido hablando de Sánchez, de Iglesias, de Bildu y de ERC, que son mis adversarios y ni siquiera son mis enemigos (menos Bildu)".