• El ritmo en las operaciones de compraventa se reduce más de la mitad entre septiembre y octubre: pasa del 8% al 2,7%.
  • Y con los precios sucede otro tanto: vuelven a subir, un 0,3%, aunque bastante menos en que el mes anterior (1,7%).
  • Son los datos de los notarios: sí, hay mejoras, y por noveno mes, pero seguimos lejos de los niveles previas a la crisis.
  • La otra cara del sector inmobiliario está en la particular burbuja que protagonizan las socimis.
Nadie discute que el mercado inmobiliario español ha pasado su peor trago. Pero eso es una cosa, y otra, muy distinta, que se pueda empezar a hablar de euforia, como si la digestión nos hubiera devuelto a la normalidad. No es así y como prueba, los últimos datos de octubre del Colegio General del Notariado, que muestran tanto una ralentización en las operaciones de compraventa de viviendas como un descenso en los precios. Avanzan a buen ritmo, sin embargo, los préstamos hipotecarios, un 15% en tasa anual. En septiembre, las operaciones de compraventa crecían al 8%, pero ese ritmo se redujo en octubre hasta el 2,7%. Aumentan, es cierto, y por noveno mes, pero "todavía muy por debajo de las cifras previas a la crisis", según los propios notarios. Con los precios sucede lo mismo: volvieron a subir en octubre aunque a menor ritmo, un 0,3%, mientras que en septiembre subían un 1,7%. El precio medio por metro cuadrado estaba entonces en 1.242 euros y octubre, en 1.226 euros. En suma, para el ajuste, queda mucho. La otra cara del sector inmobiliario español está en las ya populares socimis (sociedades cotizadas de inversión inmobiliaria), protagonistas de una nueva burbuja en el sector. Eso y no otra cosa es lo que está ocurriendo con todas esas sociedades, como Merlin Properties, Hispania, Lar o Axiane, lanzadas a comprar activos (edificios de oficinas, centros comerciales, hoteles y naves industriales), que posteriormente ponen en alquiler. En ese caso, a diferencia del mercado de compraventa de casa, la inversión si supera los niveles previos a la crisis. En 2007, esa inversión era de 10.000 millones y en lo que llevamos de año, ya supera los 10.800 millones. Sobra decir que mucha de esa inversión tiene tintes especulativos, de lo que da buena fe sus inversores (George Soros o John Paulson). Volvieron a las operaciones de compraventa de viviendas, hay dos factores que han contribuido al frenazo, según los notarios: la moderación en la venta de piso de segunda mano -10 puntos porcentuales, hasta el 4,4%-, y la contracción, de 8,9 puntos, en la venta de los pisos nuevos, hasta el -24,7%. Despegan, únicamente, con el 10,9%, las operaciones con viviendas unifamiliares, que son los únicos también en los que han subido los precios, un 4,7%. En los pisos, la caída el del 1,1%. El mayor dinamismo en el sector sí se nota, por el contrario en los préstamos hipotecarios. El número de créditos contratados para la adquisición de vivienda creció un 15%, hasta 15.163 operaciones. También ha aumentado la cuantía media, un 1,8%, hasta 117.349 euros. Rafael Esparza rafael@hispanidad.com